El jefe del equipo negociador del Gobierno, Juan Camilo Restrepo, condicionó la posibilidad de concretar un cese al fuego bilateral con la guerrilla del ELN a que se pacte una tregua 'verificable'.
'Que quede en claro: no habrá cese al fuego bilateral mientras el ELN no acepte un cese de hostilidades verificable', indicó Restrepo en Twitter.
El viernes el jefe negociador de la guerrilla del ELN, Pablo Beltrán, había dicho a la AFP en Ecuador que ambas partes estaban cerca de acordar un 'cese al fuego bilateral temporal' antes de la visita del papa Francisco en septiembre.
El líder guerrillero dijo que este cese al fuego sería distinto al definitivo que está previsto en la agenda de negociación y que sería 'de final de conflicto'.
El vocero del ELN indicó que la guerrilla esperaba 'que el gobierno rompa los vínculos que tiene con los paramilitares' y que se ponga fin a la violencia contra los líderes sociales.
La ONU sostiene que 127 activistas fueron asesinados en Colombia durante 2016, la mayoría en territorios donde las Farc habían tenido presencia histórica, y responsabiliza de los crímenes a disidentes de esa guerrilla, posparamilitares, criminales comunes e incluso al ELN.
Desde el inicio de las pláticas públicas en febrero, el ELN ha planteado detener las hostilidades, pero el presidente colombiano Juan Manuel Santos lo condiciona a que el grupo insurgente abandone los secuestros, atentados a infraestructuras energéticas y petroleras, extorsiones, entre otras acciones.
El ejecutivo colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), con unos 1.500 combatientes, realizarán una tercera ronda diálogos en Quito a partir del 24 de julio.
Santos, Premio Nobel de la Paz 2016, busca la 'paz completa' en su país tras sellar en noviembre un histórico pacto con las Farc.
Colombia vive un conflicto armado de más de medio siglo que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares y agentes estatales, dejando 260.000 muertos, 60.000 desaparecidos y 7,1 millones de desplazados.