En el coliseo de la Base Naval de Barranquilla aún no finalizan los escrutinios distritales 21 días después de las elecciones locales del pasado 25 de octubre.
Junto con Cartagena son las únicas ciudades capitales del país que restan por finalizar su proceso de escrutinios, a raíz de las irregularidades que han sido denunciadas y confirmadas.
'El caso de Barranquilla es excepcional en el sentido de que está quedada en materia de escrutinios frente al resto del país que ya terminó', señaló el vicepresidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Felipe García Echeverri a EL HERALDO.
Para el magistrado la demora de los escrutinios se ha presentado por candidatos que son malos perdedores y con malas prácticas pretenden incidir en los resultados electorales.
'Uno no puede decir que la culpa sea de Barranquilla: la culpa es de candidatos o de malos candidatos que son malos perdedores y que no le funcionaron sus malas prácticas', señaló García.
Y es que lo evidenciado en los escrutinios distritales, en los que dos candidatos a Concejo y uno a Asamblea dieron sendos 'saltos de canguro' inflando sus votaciones en 2.141 sufragios, ha sido calificado por el alcalde electo Alejandro Char como 'vergonzoso' y un 'asesinato a la democracia'.
Estas irregularidades, surgidas de la Comisión Auxiliar Número 34, tienen retrasado los escrutinios en el Atlántico, ya que la Comisión Escrutadora Departamental solo espera por Barranquilla para declarar la elección.
Estas irregularidades, que fueron corregidas durante el fin de semana por la Comisión Escrutadora Distrital mediante las Resoluciones 073 y 074 que anularon los ‘votos fantasma’ de estos tres candidatos, fueron 'muy sonadas a nivel nacional', según resaltó el magistrado.
'En Barranquilla se actuó rápido y se pudieron determinar, gracias a las denuncias ciudadanas y a que la Fiscalía se hizo presente, de manera particular los temas irregulares de esa Comisión', afirmó García.
¿Software vulnerable?. Una de las hipótesis que ha tomado fuerza en los escrutinios como origen de los aumentos irregulares en las votaciones a Concejo de María Luisa Pulgar (714 votos) y Carlos Hernández (818), y a Asamblea de Yesid Pulgar (609 votos), es la de un 'fraude técnico', producto de una hackeo al software de los escrutinios.
Esta hipótesis, defendida por la Comisión 34 en el acta final de escrutinios donde dejan constancia de las votaciones irregulares, fue valorada por García como 'materialmente imposible'.
Si bien no se refirió puntualmente al caso de la Comisión 34, el magistrado sostuvo que el software de los escrutinios es una de las herramientas en las que más ha invertido la Registraduría para reducir al mínimo el trabajo manual.
'Ese es un software que está congelado, custodiado por la Procuraduría, está custodiado por los auditores de los partidos. Es absolutamente visible', sostuvo.
Agregó García Echeverri que el componente de la trazabilidad permite reconstruir paso a paso los escrutinios, con días y horas en las cuales se hicieron modificaciones en el acta final.
Esta trazabilidad del acta, para el caso de la Comisión 34, dejó la huella de 45 cambios en dos días –martes 3 y miércoles 4 de noviembre– que incrementaron sin justificación expresa las votaciones de los candidatos anteriormente mencionados, mas dos candidatos a edil por Norte Centro Histórico, como lo reportó EL HERALDO en su edición del lunes 8 de noviembre.
El pasado miércoles 11 de noviembre, el Cuerpo Técnico de Investigaciones de la Fiscalía se tomó los escrutinios distritales e incautó 45 computadores de las comisiones escrutadoras auxiliares, así como material electoral, elementos probatorios para adelantar las investigaciones sobre las irregularidades que se presentaron en los escrutinios.
Sobre la Comisión 34 hay, por lo menos, tres demandas penales interpuestas por los apoderados de candidatos como José Cadena (Partido Liberal), Lilia Manga (Partido de La U) y Carlos Zambrano (Partido Conservador), sin contar la que presentó la misma Comisión para que se esclarezcan las irregularidades que salieron de su seno.
La Fiscalía aún no ha tomado decisiones penales.
