Ante la posibilidad planteada de repatriar al jefe guerrillero Simón Trinidad, condenado a 60 años de prisión en los Estados Unidos, algunas de sus víctimas en el departamento del Cesar rechazaron el hecho de que quien fuera su ‘verdugo’ entre las décadas de los 80 y comienzos de la 2.000, con secuestros, extorsiones e incursiones en las fincas, vuelva al país.
Ganaderos, empresarios, comerciantes y agricultores fueron víctimas del accionar de las Farc en el Cesar, al mando de Simón Trinidad. Muchos tuvieron que pagar rescates millonarios para poder hoy estar con vida y gozando de la libertad.
Roberto Lacouture, empresario del campo secuestrado por el frente 41 de las Farc en 1989, indicó que 'no creo en la necesidad de Simón Trinidad en el proceso de paz, más cuando la guerrilla tiene tantos jefes en estas conversaciones, además las Farc no han dado muestras de entregar las armas'.
Dijo que lo que realmente interesa es que haya una reparación a las víctimas y la guerrilla reconozca todos sus delitos. Recordó que en poder de los guerrilleros fue sometido a extensas caminatas y a condiciones infrahumanas. 'El secuestro es una historia que no queremos repetir'.
Otro de los secuestrados por las Farc al mando de Simón Trinidad en el Cesar, que mantuvo su nombre en reserva, manifestó que 'este jefe subversivos puede hacer sus propuestas al proceso de paz sin tener que salir de la cárcel, a través de medios virtuales, por ejemplo'.
Por su parte, el exalcalde de Valledupar Elías Ochoa Daza, secuestrado por las Farc en 1998, dijo que 'no creo que tenga nada importante o relevante que pueda aportar a los diálogos, sin embargo no me opongo, si eso de verdad contribuye a que se pueda lograr la paz'.
Trinidad pidió acudir a la mesa. En septiembre de 2012, desde la cárcel de máxima seguridad en California, Estados Unidos, Simón Trinidad, dijo durante una audiencia virtual, que estaba dispuesto a participar en los diálogos de paz con el gobierno colombiano.
El cabecilla de las Farc, leyó una carta que escribió al presidente Juan Manuel Santos donde plantea que 'Gobierno e insurgencia pueden pactar la paz y llegar a acuerdos vitales para el desarrollo y crecimiento del país en asuntos económicos, sociales y políticos; experiencias anteriores me permiten aportarle a este nuevo proceso, tengo propuestas para plantear a mis superiores que de ser tenidas en cuenta y autorizadas, le harían bien al proceso, a la paz y a Colombia'.