Tras afrontar mortalidad de cerca de la mitad de la población de árboles de aguacate criollo, según censo del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) en 2013, por presencia de la Pudrición Radical del Aguacate (PRA) en los Montes de María, se implementó un manejo integrado de la enfermedad, que generó impacto positivo en recuperación de los cultivos.
'Hoy, a zona de cargue, llegan cerca de 250.000 unidades diarias, cifra que aumentará en el punto máximo de cosecha', señaló Luis Humberto Martínez, gerente general del ICA.
La PRA es una enfermedad de importancia económica distribuida en todo el mundo, que provoca que las raíces se desprendan y se pudran, afectando el crecimiento de los árboles, las hojas son pequeñas, pierden su color verde normal y toman apariencia amarillenta, a veces con rebrotes y floraciones excesivas a destiempo.
Martínez explicó que en zonas como Montes de María, adquirió dimensión significativa por factores socioeconómicos, los cultivos no contaban con manejo agronómico, los árboles superan los 6 metros de altura, y están ubicados en lotes con alto grado de pendiente, que dificulta el manejo de la afectación.
La Dirección Técnica de Sanidad Vegetal implementó prácticas que disminuyeron población del patógeno, para renovación y formación de raíces, mitigando su efecto y alargando vida productiva de los árboles. Se entregaron insumos gratis y se capacitó sobre prevención, seguimiento, análisis de muestras de laboratorio, entre otras actividades, que generaron resultados positivos.
Hay que usar material sano, desinfectar calzado, evitar heridas en raíces, fertilizar adecuadamente, desinfectar herramientas, y seguir manejo agronómico en lotes.