El hallazgo de una muy delicada y escasa especie de caballito de mar en las contaminadas aguas de la bahía de Cartagena, en las que según un reciente informe de la Contraloría se advierte la presencia de abundantes metales pesados, se ha constituido para expertos en un guiño de esperanza en medio de la adversidad.
Así lo considera el biólogo marino Gabriel Luna, quien en diálogo con EL HERALDO, catalogó como un 'misterio' las circunstancias en las cuales una especie marina tan frágil logra sobrevivir en los altos índices de contaminación de la bahía de Cartagena.
Fue la Fundación Bahía la que dio la buena nueva del caballito de mar al mundo. En su página web publican maravillados este hallazgo y cuentan cómo lograron dar con esta especie. Fue un pescador llamado Víctor quien logró que ellos habían buscado en varios meses desde cuando un conocido les dijo que los había en la bahía.
'El cuento es que un pescador llamado Vìctor en uno de los muelles de Castillo lo encontró. Fue golpe de suerte. Aunque no iba tras un caballito ni tenía equipos, por esas casualidades, nuestro pequeño amigo delató su presencia en medio de un agua sorprendentemente clara. La mano pudo más que las humildes aletas del caballito', cuenta en su página José Yunis-Mebarak, uno de los integrantes de la Fundación. Y en ella están varias fotos. El caballito tuvieron que comprarlo al pescador y tuvieron que apresarse porque había otros compradores que ofrecían más.
Según el biólogo Luna, como principales hipótesis de la supervivencia de la especie podrían ser tenidas en cuenta la larga temporada de influencia del último fenómeno del Niño y el hecho de que, con el emisario submarino, los desechos del alcantarillado ya no son vertidos de forma directa sobre la bahía, sino que vayan hasta Punta Canoa.
Luna explicó que en ecosistemas tropicales, como lo es el caso de Cartagena, no es usual que se encuentren numerosos ejemplares de una misma especie como esa. Sin embargo, dio a conocer que existen escasos puntos de la bahía que fungen como enclaves aislados para los frágiles caballitos de mar.
Según Luna, las probabilidades de algún posible hallazgo de la especie aumentan en los bajos de la Virgen del Carmen, en la bahía, destruida hace cerca de un año por un rayo; y en los alrededores de un viejo barco de guerra que permanece hundido cerca del Club Naval. Ambos puntos reúnen 'características especiales', según explica.
Sin embargo, el hallazgo no es una tarea nada fácil. El caballito de mar fue buscando con lancha y buceadores expertos de la Fundación Bahía, pero fue hallado por un pescador que buscaba caracoles.
Para el biólogo Gabriel Luna el hallazgo debe convertirse en una motivación para que se promueva, de forma incansable, la protección de la bahía.
'Sin duda es algo muy esperanzador. Pero también es un llamado para emprendamos todas las acciones necesarias para la preservación de especies tan frágiles. Los estudios más recientes frente al tema datan de hace cerca de 10 años y merecen una actualización muy pronto', aseveró Luna.
Por su parte, José Yunis-Mebarak de la Fundación Bahía dijo en su relato del hallazgo que 'para mí el haber encontrado, o mejor, que nos hubiera encontrado este caballito, me renueva la convicción de que la bahía sí se puede recuperar. Todos los Víctor seguirán pescando caracoles en la bahía, y nosotros comiéndolos. Ojalá que esos caracoles vengan más y mejor de un medio cada vez más saludable'.
Después de admirar ese casi milagro de la bahía, el caballito de mar fue liberado.