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En un comunicado público emitido durante la mañana de este miércoles, 17 de julio, el senador Humberto de la Calle y el ex alto comisionado para la paz Sergio Jaramillo expresaron su rechazo a las recientes propuestas del presidente Gustavo Petro, relacionadas con la implementación del acuerdo de aaz de 2016.

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Bajo la consigna “¡Volvamos al Acuerdo!”, el comunicado de los fucionarios hace un llamado tanto al Gobierno Nacional como a la sociedad colombiana y a la comunidad internacional para retomar la implementación del acuerdo “como un propósito nacional”.

A través de su pronunciamiento, De la Calle y Jaramillo enfatizan en la necesidad de un esfuerzo conjunto y decidido para la implementación del acuerdo, especialmente tras el apoyo manifestado en la reciente sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

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El comunicado se centró en el rechazo de dos propuestas específicas del presidente Petro: la creación de un nuevo “tribunal de cierre” y la utilización de un mecanismo de ‘fast track’.

En lo que respecta a la primera iniciativa, De la Calle y Jaramillo consideran que la idea de un nuevo tribunal que conduzca a un “perdón social” es un error. Argumentan que dicha medida equivaldría a una “amnistía general encubierta”, socavando los esfuerzos realizados por los tribunales de Justicia y Paz y la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

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Además, aseguran, esto pondría en peligro la seguridad jurídica de quienes actualmente están sometidos a la JEP y comprometería el estándar internacional establecido por Colombia tras el cierre del examen preliminar de la Corte Penal Internacional.

En cuanto a la propuesta propuesta de recurrir a mecanismos de “fast track” para la implementación del Acuerdo, los funcionarios la rechazaron tajantemente, señalando que estos requerirían reformas constitucionales que retrasarían el proceso al menos un año.

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“El ‘fast track’ surgió como una garantía en un momento crítico como fue el proceso de dejación de armas y tránsito a la legalidad de las FARC, que requería su coordinación con una serie de garantías jurídicas. Esa urgencia no subsiste hoy”, señala el comunicado, en el que además argumentan que un nuevo ‘fast track’ para temas ajenos al acuerdo no tiene justificación.

De la Calle y Jaramillo sugieren que en lugar de recurrir a esta última estrategia, el Estado debería buscar un acuerdo nacional, un compromiso ya establecido en el acuerdo de paz. Pues, según explican, lograr consensos políticos en torno a puntos críticos de la implementación facilitaría el paso de las leyes derivadas del acuerdo por el Congreso.

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El pronunciamiento concluye insistiendo en que “el corazón de la implementación del acuerdo de paz no radica en las normas, sino en el compromiso de todos los funcionarios públicos” y de la sociedad en general.

Finalmente, De la Calle y Jaramillo destacan la importancia de una “vigorosa puesta en marcha de las políticas públicas necesarias” y la inclusión de todas las regiones en un modelo de “paz territorial”, reiterando su llamado: “¡Volvamos al Acuerdo!”.