Los ataques perpetrados en la tarde del pasado martes por parte de las disidencias del EMC contra la base militar de Suárez, Cauca, produjeron el desplazamiento en las últimas horas de 300 personas, que se refugiaron en la Iglesia de Santa María, protegiéndose de los cilindros que lanzaban los integrantes del grupo armado ilegal contra la fuerza pública.
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El noticiero televisivo Noticias Caracol reportó en este sentido que familias enteras permanecen aisladas, sin alimentos y bajo el fuego cruzado.
“Nos despertaron las detonaciones, fue algo impredecible. Los niños y mujeres embarazadas sufrieron el impacto de la guerra donde los cilindros caían cerca de las casas”, narró al medio nacional Jorge Eliécer González, presidente de la Junta de Acción Comunal.
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Esto en medio de la arremetida de las disidencias en otros dos municipios del Cauca: Santander de Quilichao y Patía son el epicentro de los enfrentamientos con la fuerza pública. Un militar resultó muerto.
Los combates con el Ejército Nacional continúan y esta vez el epicentro fueron los municipios de Santander de Quilichao y Patía.
La tarde del pasado martes tropas del Comando Específico del Cauca sostuvieron combates contra las estructuras Dagoberto Ramos y Carlos Patiño en zona rural de los municipios caucanos en mención.
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El primer combate fue en Patía cuando Tropas de la Vigésima Novena Brigada se encontraban adelantando operaciones militares en la vereda La Fonda. En estos hechos fue asesinado el soldado Pedro Pablo Sánchez Golondrino otro resultó herido y evacuado de la zona para recibir atención médica.
“La reacción de las tropas fue reforzada por soldados de la Fuerza de Despliegue Rápido N.º 4 y del Grupo de Caballería Liviano N.º 8, lo que permitió repeler el ataque de este grupo armado”, señaló la Tercera División del Ejército Nacional.
Los combates entre el grupo guerrillero y la fuerza pública mantuvieron paralizada a buena parte de la zona rural de ambas poblaciones. Así se evidencia en los videos que circulan en redes en los que se observa a pobladores resguardándose de los impactos de fusil y quedando en medio del fuego cruzado.
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De acuerdo a la inteligencia militar, varios integrantes de este grupo armado resultaron heridos tras los combates.
Estos enfrentamientos suceden luego de que el pasado lunes se registraran atentados terroristas en Morales, Cauca, y en Jamundí, Valle del Cauca, que cobraron la vida de cuatro uniformados de la Policía Nacional.
Funcionarios de la fuerza pública informaron de un ataque, atribuido al frente ‘Jaime Martínez’ del Estado Mayor Central (EMC) de las disidencias. Este, según el reporte de los uniformados de la Policía de Morales, se produjo sobre las 6:00 de la mañana, cuando fueron sorprendidos por ráfagas de fusil y explosivos desde el parque principal.
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Ante esto, la respuesta de las fuerzas de seguridad incluyó, entre otras estrategias, el despliegue de dos helicópteros de apoyo: un Huey del Ejército y un UH-60 de la Policía.
El pasado martes en la mañana el ministro de Defensa, Iván Velásquez, anunció que llegarán al Cauca dos batallones de Fuerzas Especiales del Ejército Nacional para aumentar las operaciones e incrementar el ataque a las finanzas criminales.
“El Estado Mayor Central en el suroccidente del país demostró con su actitud que no estaba efectivamente por la paz, que las acciones que desarrollaba durante el período que estábamos en el cese al fuego con esa organización, en general en el país, demostró que era también un aprovechamiento del propio cese en acciones que cometía contra la población”, sostuvo en una conferencia de prensa en la mañana del martes, junto al comandante general de las Fuerzas Militares, general Helder Giraldo y al director de la Policía, general William Salamanca.
En ese sentido, el titular de la Defensa explicó que el EMC que opera en el suroccidente de Colombia “no está ahora en proceso de negociación, de manera que no es, precisamente, que se esté negociando con ellos. Hay una fractura dentro del EMC en la que se evidencian por lo menos dos grupos: el del denominado ‘Mordisco’ y el de ‘Calarcá’, este último permanece en las negociaciones”.
Las declaraciones se dan luego de los hechos ocurridos por esa organización en Miranda, Cauca, que el pasado viernes que segó la vida de un menor de 12 años y afectó gravemente a dos adultos, tras un atentado terrorista, mientras que en Morales, fueron asesinados dos policías luego de un hostigamiento a la estación de policía.
El ministro aseveró que: “Esa organización de narcotráfico denominada Estado Mayor Central, en el Cauca, con el frente ‘Jaime Martínez’, pero también con la ‘Dagoberto Ramos’ y la ‘Carlos Patiño’, acuden a un atentado contra la población porque no es una acción exclusiva contra la Fuerza Pública. Sino en esa pretensión, que algunos han afirmado tiene esta organización, en el suroccidente del país, de que se vuelva a pactar un cese, hay una respuesta enfática del ministro de Defensa: No se pactará nuevo cese con el Estado Mayor Central en el suroccidente”.
“Lo que ha mostrado esta organización criminal en esta región del país, los ataques que ha realizado esta organización contra la población civil, alejan cualquier posibilidad de cese. Y en esto que resulta realmente muy indicativo, no es la pretensión de avanzar en un proceso de paz, sino en la necesidad de tener un cese para poder continuar afianzándose en el aprovechamiento de la minería ilegal del narcotráfico, que parece muy indicativo, porque esto demuestra entonces que no es el propósito de paz, sino como tantas veces lo ha venido señalando el Presidente: su objetivo es el incremento de la riqueza a través del narcotráfico y de la minería ilegal, especialmente, pero también de la extorsión”, afirmó.
Reportó que se ha venido desarrollando durante este año el Plan 16 mil, que ha permitido que para el Cauca se hubieran asignado 15 nuevos pelotones, de los cuales ya fueron entregados 11, cerca de 450 hombres, que quedan por asignar”.
Asimismo, el ministro de Defensa subrayó que con el Ministerio del Interior se fortalecerán las capacidades tecnológicas en esa región del país, con el establecimiento de 125 cámaras de circuito cerrado, que tendrán la capacidad de identificar placas y rostros a una distancia de hasta 2.5 km, con desarrollos tecnológicos de la Dirección de Telemática de la Policía Nacional.
Entre otras acciones informadas por el ministro se encuentran la erradicación de la minería ilegal, con operaciones llevadas a cabo por la Fuerza Pública y paralelamente, la “seguridad humana”, la necesidad de la transformación del territorio bajo el liderazgo del sector Defensa.
“Vamos a desarrollar acciones para mejorar las condiciones materiales de existencia de la población del departamento. En alianza con los Ministerios de Justicia, Agricultura, Salud, Educación, la Dirección Nacional de Planeación, Prosperidad Social y la Gobernación del Cauca, también con apoyo de aliados de Cooperación Internacional, nos van a permitir avanzar, por ejemplo, en la sustitución de cultivos de coca, un plan que ya ha venido en ejecución, pero que pretendemos un lanzamiento que tendremos en el departamento del Cauca”, concluyó.
Por su parte, el presidente Gustavo Petro tuiteó el pasado martes la tasa de homicidios en el Cauca en los últimos gobiernos 'para que veamos qué ha pasado con la paz y la violencia en la región. Hacer trizas la paz, que lo hizo lo votantes del No y después el gobierno de 'hacer trizas la Paz' trajo estas consecuencias que nosotros tratamos de cambiar' (sic).
En el cuadro se muestra que la tasa de homicidios en Cauca por cada 100 mil habitantes en 2011 estaba en el 43,2, mientras que la del país era de 37,2; en 2016 en el Cauca cayó al 19,4 y la del país estaba en 24,6; en 2021 subió al 50,5 en el Cauca y la del país a 25,9 y en 2023 ascendió a 53,3 en el Cauca y bajó a 25,7 la del país.