En una operación conjunta que abarcó Alemania, Holanda, Estados Unidos y Colombia, las autoridades lograron la captura con fines de extradición del ciudadano holandés Taoufiq Ramsis. La acción se llevó a cabo en un sector exclusivo de la ciudad de Medellín, como parte de una ofensiva transcontinental para desmantelar una red de lavado de activos y narcotráfico.
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Ramsis es requerido por las autoridades de Estados Unidos por su participación en delitos de lavado de activos, narcotráfico y conspiración. Su rol en una red de blanqueo de fondos ilícitos a través de criptomonedas lo puso en la mira de las fuerzas del orden internacional.
De acuerdo con las autoridades, la estructura desarticulada tenía alcance global, con conexiones para sus operaciones ilícitas en América, Europa y Australia. Colaboraba estrechamente con organizaciones de tráfico de drogas independientes establecidas en Colombia, facilitando y agilizando el delito de narcotráfico en la región.
Taoufiq Ramsis no solo estaba involucrado en transacciones internacionales de lavado de dinero a gran escala, sino que también actuaba como un destacado empresario, utilizando diversas empresas como fachada para encubrir sus actividades ilícitas.
La operación representa un golpe significativo contra el crimen organizado a nivel internacional y destaca la cooperación efectiva entre las autoridades de distintos países en la lucha contra el lavado de activos y el narcotráfico. Ramsis ahora enfrentará un proceso de extradición que lo llevará a responder ante la justicia estadounidense por sus presuntos delitos.
