El Gobierno y la Alcaldía anunciaron el pasado jueves, en medio de las medidas de carácter humanitario para mejorar las condiciones de vida de los cerca de 1.200 indígenas embera desplazados en la capital, que habrá un acto de reconciliación entre las comunidades ancestrales y la Policía en la ciudad tras el episodio de violencia del pasado miércoles.