Compartir:

Más de medio centenar de campesinos volvieron a las calles de Medellín este lunes para pintarlas de colores desfilando con sus vistosos arreglos florales como parte de una tradición que reapareció llena de vigor y se encargó de ir bajando el telón de la Feria de las Flores.

La edición 65 del Desfile de Silleteros fue un desahogo para estos cargueros, que dejaron en la madrugada sus jardines en el caserío de Santa Elena con la ilusión de reencontrarse con los aplausos del público después de 'dos años muy tristes de encierro' por la pandemia, que los mantuvo alejados de las ovaciones por el arte que llevan sobre su espalda.

El presidente de la Corporación de Silleteros de Santa Elena, Federico Alzate, explicó que el 'principal anhelo' de estos campesinos era cargar su silleta como una parte 'fundamental' de su tradición al evocar 'a esos viejos que bajaban desde la montaña con sus silletas a Medellín', en lo que fue el inicio del desfile hace 65 años.