La Secretaría de Salud de Bogotá informó que un niño de un año y nueve meses, de la minga indígena que permanece en el Parque Nacional de la capital del país, murió por un paro cardiorrespiratorio, al parecer ocasionado por las condiciones climáticas y un cuadro respiratorio agudo que padecía desde hacía varios días.
En el emblemático lugar capitalino permanecen desde hace dos meses asentados cerca de 1.500 indígenas de 14 pueblos distintos, quienes iniciaron una negociación con el distrito el pasado 23 de octubre, llegando a un final provisional el pasado 12 de octubre, cuando se levantaron de la mesa las partes.
Los miembros de las comunidades ancestrales advierten que las opciones que les ha dado el distrito para reiniciarse no cuentan con las condiciones mínimas que requieren.