Margarita Cabello Blanco hizo toda la carrera judicial desde abajo hasta las más altas esferas del poder central: empezó como escribiente en Barranquilla en los ochentas y llegó a ser presidenta de la Corte Suprema de Justicia y posteriormente ministra de Justicia.
Es abogada egresada de la Corporación Universitaria de la Costa, especialista en Derecho de Familia de la Universidad Autónoma de Bucaramanga y en Derecho Procesal Civil de las universidades Externado de Colombia y de Cartagena, y es candidata a la maestría en Derecho Procesal Contemporáneo en la Universidad de Medellín.
Tras su primer trabajo como escribiente pasó a ser jueza penal municipal en Sabanalarga, y fue también jueza de menores y jueza civil del Circuito de Barranquilla. Posteriormente llegó a la magistratura del Tribunal Superior de Barranquilla y después a la Sala de Casación Civil de la Corte Suprema de Justicia, de la cual fue presidenta en 2016.
En el sector privado laboró como jefe jurídica durante dos meses en la Corporación Financiera del Norte, Cofinorte, del Grupo Santo Domingo.
Su llegada a la Procuraduría es en realidad un regreso: ejerció durante tres años, de 2009 a 2012, el cargo de procuradora delegada de la Sala Disciplinaria, de la mano del polémico exprocurador general Alejandro Ordóñez.
El expresidente Álvaro Uribe, por la recomendación de Ordóñez, la incluyó en la segunda terna que presentó a la Corte Suprema para elegir fiscal general en 2009.
Además, estuvo interesada en la precandidatura a la Gobernación del Atlántico que finalmente ganó José Antonio Segebre.
Ha sido además catedrática por más de 20 años en Unicosta y en las universidades del Norte, Libre y Simón Bolívar de Barranquilla, en las especialidades de Derecho Probatorio, Procesal Civil y de Familia.
En el perfil publicado en el Ministerio de Justicia consta que 'en 2016 recibió la condecoración José Ignacio de Márquez al mérito judicial en las categorías Plata y Oro por su destacado desempeño, pues fue la mejor magistrada de tribunal superior del país y la mejor magistrada de la Corte Suprema de Justicia'.
Fue miembro del comité directivo de la Escuela Judicial ‘Rodrigo Lara Bonilla’ y actualmente es miembro de la Academia Colombiana de Jurisprudencia y del Instituto Colombiano de Derecho Procesal. Pertenece a la Comisión Nacional de Género de la Rama Judicial, de la que fue presidente entre febrero de 2017 y febrero de 2018. Y también fue miembro de la Comisión Permanente de Género y Acceso a la Justicia de la Cumbre Judicial Iberoamericana de 2014 a 2016.
En 2018 fue incluida en la terna para fiscal ad hoc del presidente Duque para investigar el caso Odebrecht. La terna estaba integrada por la secretaria jurídica de Palacio, Clara María González y el decano de Derecho de la Universidad Sergio Arboleda, Leonardo Espinosa, quien finalmente salió electo.
Cinco meses después, el presidente Iván Duque la nombró ministra de Justicia y a mediados de agosto la ternó a la Procuraduría, convirtiéndose tras la decisión del Senado este jueves en la primera mujer procuradora general de la historia Colombia.