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A menos de dos semanas de que se cumplan 9 años de la muerte en extrañas circunstancias del joven guajiro Luis Andrés Colmenares, su padre, Luis Alonso, dialogó con EL HERALDO sobre la nueva prueba que no fue a juicio y que probaría que a su hijo lo habrían golpeado con una botella en el cráneo. Además, dijo que la tardanza de casi tres años del Tribunal Superior de Bogotá para decidir en segunda instancia sobre la presunta participación o conocimiento de Laura Moreno y Jessy Quintero en los hechos es sinónimo de 'confianza' de que está evaluando las evidencias.

La nueva prueba sería en realidad el primer reporte forense sobre el cadáver del estudiante villanuevero y que revelaría que a la víctima le propinaron un golpe en la cabeza con el fondo de una botella el 31 de octubre de 2010.

La evidencia sería importante para la parte acusadora porque fue el primer informe que entregó el perito Rubén Darío Angulo, a partir del cual se ordenó la exhumación que hizo el exdirector de Medicina Legal, Máximo Duque.

Y lo clave de la prueba radica en que, a pesar de que Duque concluye lo mismo: que hay un golpe en el cráneo de la víctima con el fondo de una botella, la defensa de los acusados sembró las dudas por aparentes descuidos que habría tenido Duque al momento de la exhumación y que, según la defensa, habrían llevado a que fuera este quien en la diligencia hubiera causado las fracturas en el cráneo. Sin embargo, esta evidencia, previa a la diligencia de Duque, trae el mismo reporte: golpe en la cabeza con el fondo de una botella.  

La evidencia la dio a conocer el programa televisivo 4 Caminos, del Canal RCN, y en ella se lee el informe de Angulo: 'Hay una herida en la región supraciliar derecha. Es una fractura en esta región que tiene una forma muy característica, es una forma ovalada de la herida. Las heridas se producen de conformidad con el elemento que hace la herida. (...) Esta herida ovalada corresponde a un elemento ovalado. En este caso, podríamos decir que se asemeja al borde posterior de una botella'.

Para el perito, que revisó el álbum fotográfico del levantamiento del cadáver, el álbum fotográfico de la necropsia y el informe de necropsia, es altamente improbable que en un eventual golpe contra el caño del parque El Virrey, lugar de los hechos, Colmenares se hubiera producido esa herida en el cráneo: 'Es muy nítido, muy específica, de bordes muy regulares y en el caño hay un material rugoso que iría a producir, de pronto, la fractura, pero en otras características'.

Este reporte respalda la versión que han tenido las víctimas y el ente de investigación penal sobre el caso: el estudiante villanuevero fue golpeado por una o varias personas, perdió el conocimiento y murió ahogado en el caño de El Virrey. Pero en las decisiones de primera instancia que han favorecido hasta ahora a Moreno, Quintero y Carlos Cárdenas -exnovio de Moreno-, los jueces han fallado de acuerdo al dicho de la defensa: Colmenares corrió borracho, cayó al caño, se golpeo y murió ahogado.

'Lo que hicimos fue contratar al médico Angulo para que nos diera una opinión profesional en principio tomando como base el álbum fotográfico del levantamiento del cadáver, el álbum fotográfico de la necropsia, el informe del levantamiento del cadáver y el informe de la necropsia de Medicina Legal. Y él dice que aquí hay unas fracturas que no corresponden al golpe de una caída, sino con un elemento cortocontundente, y además de eso observa que hay una herida en la parte de abajo de la barbilla que no se la puede hacer una persona cuando cae sino que tuvo que haber sido de alguien', cuenta el padre de la víctima. 

Sobre estos reportes, que según Fiscalía y Procuraduría no fueron tenidas en cuenta por los togados que fallaron en los procesos, el catedrático villanuevero advierte que 'lo que pasó es que hubo audiencias que se hicieron privadas, reservadas, por el tema forense, y nadie se dio cuenta de eso, (...) y es para que vean la cantidad de cosas que la jueza desconoció'.

Las llamadas. En el programa televisivo se da cuenta, además, de que Moreno habría estado días después de los hechos, al menos durante tres oportunidades, en El Virrey. Y se sabe por aparentes reportes de llamadas desde el celular de Moreno los días 4, 5 y 6 de noviembre. No obstante, en el juicio se centraron en las llamadas de los presuntos implicados durante el 30 y 31 de octubre.

'Hay llamadas de Laura Moreno desde la zona del caño. (…) Ella sabía que mi insistencia era buscar las cámaras', dijo Oneida Escobar, madre de la víctima, a Cuatro Caminos.

El padre de Colmenares, a su vez, le explicó a este diario que lo que hicieron fue que 'tomaron el link de las llamadas y se dieron cuenta de que habían unas llamadas desde el caño o en los alrededores que no tenían explicación y ademas de eso unas que se hicieron en los días posteriores al crimen'.

Agregó el padre de la víctima que de acuerdo con lo que había dicho Moreno, a ella se le había perdido su teléfono antes de los hechos: 'Pero ese teléfono lo siguieron utilizando, como se demostró en los análisis. (...) Y ese es el teléfono desde el que Laura hace llamadas desde el caño, y lo que uno presume es que yendo tantos días seguidos, y cuando se van a buscar las cámaras, 17 cámaras desde la discoteca hasta el caño, y no hay ni una, entonces uno puede relacionar'.

El proceso, ahora, lleva casi tres años para decisión en segunda instancia en el Tribunal Superior de Bogotá, luego de que el 20 de febrero de 2017 la jueza 11 de conocimiento de Bogotá, Paula Astrid Jiménez, resolviera absolver a Moreno y Quintero de los delitos homicidio en coautoría impropia, encubrimiento de homicidio y falso testimonio.

La jueza concluyó en su decisión que 'las lesiones de Luis Andres Colmenares en el rostro son consistentes con una caída de altura y no con golpes propinados por terceros'.

Pero la Fiscalía y la Procuraduría apelaron dicho fallo en informes que en su momento reveló este diario. La exfiscal 60 delegada ante el Tribunal Superior de Bogotá, Sandra Jeanette Castro Ospina, indicó que 'había inflamaciones en el arco supraciliar derecho, en la zona frontal, en el arco superciliar izquierdo, en la nariz y el mentón, lo que indica que ocurrieron mientras Luis Andrés Colmenares estuvo con vida'. A su vez, el procurador tercero delegado para la Investigación y Juzgamiento Penal, Jairo Salgado Quintero, concluyó que hubo ocho versiones entregadas por Laura sobre la supuesta caída de Colmenares: 'Ofreció variadas y contradictorias versiones sobre lo ocurrido en torno a la desaparición y muerte de Colmenares'.

Frente a la tardanza del Tribunal, Luis Alonso Colmenares le dijo a este diario: 'En mi casa todo el mundo está desesperado, pero a mí más bien lo que me da es confianza de que el Tribunal está evaluando, valorando objetivamente, todo el acervo probatorio'.