Lo que inició como una marcha pacífica por parte de estudiantes en Bogotá, terminó en caos luego de que al menos 25 encapuchados ingresaran de forma violenta en la tarde del viernes a la sede del Icetex en Bogotá e incendiaron el primer piso de la edificación.
Los manifestantes atacaron con piedras el edificio y lanzaron bombas molotov.
Según indicó el jefe de seguridad de la entidad, en el interior había alrededor de 200 personas, entre trabajadores, contratistas y estudiantes que estaban haciendo las vueltas de su crédito estudiantil, quienes aseguran que tuvieron que defenderse con sillas, cascos y todo lo que encontraron a mano.
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Ante estos hechos, el presidente Iván Duque ordenó a la Policía Nacional, a los ministros de Defensa e Interior y demás autoridades, iniciar una investigación para dar con las capturas de los responsables de los actos de vandalismo.
Duque señaló a través de su cuenta de Twitter que respeta las protestas pacíficas, pero que no tolerará el vandalismo.
Aunque al inicio las marchas fueron pacíficas, en el camino se presentaron los desmanes, que fueron rechazados por los estudiantes, quienes sostienen que se trató de un grupo de vándalos que hicieron parte de la manifestación.
