La Fiscalía acusó formalmente este miércoles al ex representante de Hyundai en Colombia Carlos Mattos por supuestos pagos para que se tomaran decisiones judiciales a su favor en el marco de las demandas de representación de la firma de automóviles en el país.
El ente acusador llamó a juicio a Mattos por el delito de cohecho, por presuntamente enviarle $100 millones a la jueza 16 Civil de Bogotá, Ligia Hernández, luego de que la togada confirmara las medidas cautelares que le permitieron seguir ejerciendo como representante de Hyundai en el país.
El fiscal precisó en este aparte que aunque no hubo un pacto previo entre el empresario y la togada para el pago, tras la decisión judicial los asesores del cesarense contactaron a la administradora de justicia para hacerle llegar el dinero 'como agradecimiento'.
Luego hubo otras entregas de dinero por parte de Mattos a la jueza, relata la Fiscalía, con lo que en total Hernández recibiría $200 millones.
Entre tanto, la Audiencia Nacional Española dejó en firme este miércoles el trámite de extradición del empresario por los dos procesos que se le siguen en Colombia. No obstante, hace falta que el Consejo de Ministros del país ibérico firme el proceso de envío.
Ya el cesarense había sido imputado como aparente responsable de los delitos de cohecho por dar un ofrecer, utilización ilícita de redes de comunicaciones, acceso abusivo a sistema informático y daño informático, por haber manipulado, a través de medios informáticos, el reparto de una demanda que interpuso contra Hyundai, que en septiembre de 2015 le quitó la representación comercial de la empresa en Colombia.
En medio de este caso fue judicializado el juez sexto civil del circuito de Bogotá, Reinaldo Huertas, señalado de haber recibido $2 mil millones de Mattos para que lo favoreciera.
La demanda a favor del empresario cesarense le significó hacerse a US$35 millones, debido a que las medidas dictadas por el juez Huertas derivaron en que la empresa ecuatoriana Neocorp, en disputa de la comercialización de Hyundai en Colombia, negociara con el empresario costeño.
Mattos trataba de evitar, con la demanda, que Neocorp, que se iba a encargar de la comercialización de Hyundai en Colombia, entrara a operar en el territorio nacional.