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El ministro de Defensa, Guillermo Botero, aseguró que en el país existe una doble moral frente al uso del glifosato en la fumigación para combatir los cultivos ilícitos.

'En el ojo del huracán está la fumigación con glifosato y no es que nos guste fumigar, pero hay una doble moral alrededor de esto. El glifosato es una molécula que se descubrió en los años 50 y llegó en el año 72 al país y es un producto de toxicidad IV y hay muchísimos otros herbicidas más peligrosos que se usan en Colombia', indicó Botero en el marco del Congreso anual de Confecámaras.

De acuerdo con el funcionario, el glifosato se consigue en cualquier almacén de productos agropecuarios en el país bajo 70 denominaciones de venta libre y este herbicida es utilizado por los productores agropecuarios para combatir las malezas, para que no compitan con el cultivo principal como por ejemplo en el café, el maíz, el cacao, la palma, la caña de azúcar, entre otros.

'El país tiene aproximadamente un millón de hectáreas en café, casi 500.000 hectáreas en palma, 280.000 en caña de azúcar y absolutamente en todas ellas se está utilizando el glifosato, pero cuando decimos que los vamos a utilizar para las 250.000 hectáreas de coca, para eso si es malo y ya quisiera ver este país el día en que se prohíba el uso de este herbicida, ahí si saltaría toda esa seguridad alimentaria a defender su uso, pero como es para combatir algo ilícito, estas mafias se han encargado de formar y alimentar frente a la opinión pública sus efectos dañinos, que como en todo químico claro que los puede tener', resaltó Botero.

El jefe de la cartera de Defensa indicó que uno de los argumentos es que un instituto de cancerología de los Estados Unidos aseguró que el uso de este químico podía ser un factor cancerígeno, pero 'no acabaron de decir el resto de la frase como lo mismo que las carnes rojas, los asados y el secador de pelo de las señoras'.

'Esa es la doble moral que nosotros no podemos entender. Claro, las aspersión aérea se suprime como política por unos acuerdos y luego viene un pronunciamiento de la Corte Constitucional que no lo prohíbe sino que dice que se tiene que cumplir seis protocolos para poder fumigar por la vía aérea', indicó Botero.

El ministro destacó que la tecnología ha avanzado mucho en materia de fumigación, en donde ya se cuenta con métodos más precisos para la aplicación de los productos que permiten ser más eficientes, en el caso de que el país decidiera volver a realizar la fumigación aérea.

Frente a la erradicación voluntaria, el ministro indicó que está condicionada a 76.000 familias que firmaron un acuerdo y que van a recibir un estipendio por erradicar y que esos acuerdos se cumplirán 'aunque sea sudando sangre, porque verdaderamente las finanzas están en problemas y habrá que conseguir la plata, sin violar la regla fiscal, para terminar de financiar ese proyecto y no estamos en condiciones de firmar más contratos por este tema'.

En ese sentido, Botero indicó que la meta es erradicar a finalizar este año en total 50.000 hectáreas. Sin embargo resaltó que el tema es complejo por la resiembra de la coca en otros lugares.

'Si vamos a erradicar ese número de hectáreas muchos dirán que en los próximos años vamos a acabar, pero tenemos que tener en cuenta el fenómeno de la resiembra y las nuevas áreas de siembra es lo que verdaderamente nos tiene preocupados. Nosotros tenemos que llegar el 7 de agosto de 2022 a tener un 30 % del área que hoy tenemos sembrada y lo vamos a intentar, porque tenemos la decisión de trabajar por ese propósito', explicó Botero.

El ministro destacó que la coca es la fuente de todos los males que está viviendo el país porque está generando inseguridad en el campo y en las ciudades ya que son organizaciones criminales que están dedicadas a proteger su negocio y que muchas veces corrompen y financian la protesta social.

'Con los dineros ilícitos corrompen y financian la protesta social y por eso cada vez que ustedes ven que cerraron la Panamericana o ayer que cerraron unas carreteras en Nariño, detrás de eso siempre hay mafias organizadas, supranacionales que lavan el dinero de diferente manera y con gran habilidad', indicó Botero.

El funcionario también destacó que la cocaína está comenzando a corromper a la juventud y ha hecho que 2.2 millones de personas sean adictas y que la consuman frecuentemente, por lo que este es un tema de mucha preocupación.

Finalmente, Botero aseguró que los sistemas financieros que utilizan estos grupos criminales son la cocaína, la minería ilegal, el secuestro, la extorsión y el contrabando.