Compartir:

Los representantes sanandresanos Jack Housni y Julio Gallardo tramitan un proyecto de ley en el Congreso que busca regular el uso, la distribución y la venta de productos plásticos, material que afecta la biodiversidad marina de la ínsula.

'Es con el ánimo de proteger los mares de Santa Catalina, el archipiélago de San Andrés y Providencia y sus alrededores. San Andrés está nadando en un mar de plástico. Hay un millón de turistas, llevan muchas bolsas de plástico. Las costumbres nuestras son muy malas y el océano está lleno de plástico, no solo el nuestro, sino de todo el mundo. Así que estamos haciendo un llamado a la humanidad para el cambio de las costumbres. No podemos seguir destruyendo nuestro planeta, los peces se están muriendo por el plástico', advirtió Housni.

Por su parte, Gallardo indicó que este proyecto permitirá el control del plástico, que afecta los arrecifes de coral: 'El proyecto quedó en limitar y en prohibir la utilización de bolsas plásticas de un único uso, es decir, esas bolsas plásticas con calibre menor que son las que más contaminan y que realmente su prohibición no implicaría perjuicios graves o no implicaría trabas muy profundas para el factor económico del archipiélago. El valor económico continuaría y la gente simplemente tendría que mejorar el manejo de lo que compra en los supermercados'.

A través de un comunicado, ambos parlamentarios señalaron que la iniciativa puede ser el inicio de un manejo ambiental para todo el país, y que se pensó en el archipiélago porque su insularidad y su ambiente son muy frágiles. De hecho, anotaron, se sigue en este caso la experiencia en otros sitios del mundo que tienen esa prohibición, como Isla Galápagos en Ecuador, que hace dos años tiene prohibido la utilización de bolsas plásticas.

De acuerdo con cifras oficiales, el 17 por ciento de los peces que viven en zonas arrecifales y bosques marinos y manglares, están muriendo a causa del plástico.

Además, el 76 por ciento de las áreas coralinas colombianas se encuentran en la protegida reserva de biósfera Seaflower, en San Andrés, Providencia y Santa Catalina y cuenta con una extensión de 180.000 kilómetros cuadrados, que equivale al 34% del territorio caribeño colombiano.