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Un patrullero de la Policía resultó herido ayer en medio de un hostigamiento a una comisión integrada por funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el Gobierno Nacional y las Farc, mientras adelantaban la ubicación y extracción de un lote de armas y explosivos en el sector conocido como El Pedregal, zona rural del municipio de Caloto, norte del Cauca.

En palabras del personero de esta localidad, Luis Arturo Moreno, el patrullero Reynel Eduardo Escobar Sabogal fue atendido en el hospital Niña María. El uniformado recibió un disparo de fusil en el estómago cuando prestaba seguridad a la comisión objeto de la agresión.

La situación se dio alrededor de las 8:00 a.m. de ayer y las autoridades confirmaron que un integrante de la Unidad para la Edificación de la Paz (Unipep) resultó herido. El personero contó que cuando fueron atacados los integrantes de la comisión, el grupo especial de la Policía respondió al hostigamiento, generando un intercambio de disparos por un tiempo muy corto. 'El uniformado debió ser evacuado del área y llevado al hospital de esta localidad', precisó Luis Arturo Moreno.

A raíz de la gravedad de la situación, los integrantes de la comisión optaron por trasladarse al casco urbano donde explicaron que al momento del hostigamiento se encontraban en la ubicación y extracción de un lote de armas y explosivos, como parte de las tareas programadas en relación a la dejación de armas de las Farc, como fue pactado en los Acuerdos de paz.

Integrantes de la fuerza pública y de la Policía explicaron que habían realizado la primera extracción de 50 kilos de explosivos, 56 granadas de esparcimiento y 10 misiles, y al momento de realizar la segunda extracción del lote, fue cuando se presentó el ataque.

'El personal uniformado que acompañaba respondieron al ataque, por fortuna los integrantes de esta comitiva resultaron ilesos', explicaron integrantes de la Policía.

El patrullero Reynel Eduardo Escobar Sabogal, de 31 años de edad y oriundo Calarcá (Quindío), fue remitido en ambulancia hacia la clínica Valle del Lili de Cali, indicaron voceros de la Policía. Su condición médica es estable.

El hostigamiento fue atribuido a integrantes del Ejército de Liberación Nacional (Eln) grupo guerrillero que reactivó su accionar militar en municipios nortecaucanos como Caloto, Corinto, Santander de Quilichao y Miranda, entre otros. El Ejército adelanta operativos en la zona con el fin de ubicar a los responsables del ataque.

Segunda agresión

Por segunda vez en el Cauca se presenta hostigamientocontra integrantes de los grupos que adelantan tareas relacionadas con el proceso de paz.

El 1 de agosto, entre las veredas El Socorro y San José del municipio de Suárez (Cauca) hacia las 6:30 p.m., unos ocho sujetos armados con fusiles salieron a una vía de la zona y la obstaculizaron con un tronco. Posteriormente dispararon contra Gregorio Mosquera y Aldemar Dizú Casamachín, integrantes de las Farc, que se movilizaban en una motocicleta.

Los atacantes huyeron por entre la maleza, pero uno de ellos fue impactado en la rodilla derecha. La motocicleta, que había sido alquilada para movilizarse quedó abandonada en el sitio del ataque.

Gracias a la colaboración de la comunidad, los agredidos se dirigieron hacia la vereda Lomitas, en donde fueron trasladados hasta las instalaciones de la Base del Ejército Nacional. De allí fueron dirigidos hacia la Estación de Policía de Suárez, hasta donde llegaron agentes de la Unipep para trasladaron hasta las instalaciones del Mecanismo de Monitoreo y Verificación, explicaron testigos.

'Los integrantes de las Farc Ep acababan de salir de un taller sobre pedagogía de los acuerdos con participación de más de 100 personas en el Resguardo Indígena de Honduras. Encontrándose en el proceso de reincorporación desde la ZVTN Carlos Perdomo', explicaron integrantes del Comité del Suroccidente de Acompañamiento de la Sociedad Civil al Mecanismo de Monitoreo y Verificación, MM&V.

Junto a esta denuncia el representante en el Cauca de la Red de Derechos Humanos del Suroccidente Colombiano ‘Francisco Isaías Cifuentes’, Deivin Hurtado, también explicó que desde finales del 2016 en el municipio de Morales, hombres fuertemente armados que se hacen pasar como disidencia o integrantes del Eln, realizan acciones que atentan contra la población civil con amenazas, extorsiones, desapariciones forzadas y homicidios. Situación similar se registra en otras localidades del norte del departamento, según las denuncia de organizaciones sociales. ​