La Fiscalía General de la Nación les imputó cargos al empresario Federico Gaviria y el contratista Eduardo José Zambrano. Los delitos por los que deben responder los hoy procesados son concierto para delinquir, lavado de activos, cohecho, tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito.
En la mañana de este miércoles, altamente escoltados, llegaron al Complejo Judicial de Paloquemao los dos hombres que hoy hacen parte de las investigaciones en el escándalo de Odebrecht. Gaviria y Zambrano lucieron cabizbajos y en silencio cuando ingresaron al estrado del juzgado 23 de control de garantías para avanzar con su proceso judicial. Sobre las 5:30 de la tarde, el juez determinó que la diligencia continuará el próximo viernes 21 de julio a las 8:30 de la mañana.
Los cotejos del ente investigador revelaron que Gaviria habría sido pieza clave en la licitación del tramo dos de la Ruta del Sol, en la que presuntamente se habría realizado un contrato cercano a los 4,6 billones de pesos.
Asimismo, se conoció que el empresario también tendría vínculos con el hoy detenido exsenador Otto Nicolás Bula, quien también es investigado por los mismos hechos.
El ente acusador recordó que no es la primera vez que Gaviria se ve enredado por cuestiones jurídicas. El hoy procesado ya había pagado una condena de dos años y medio por los escándalos relacionados con el ‘carrusel de la contratación’.
Respecto del contratista Eduardo Zambrano, se conoció que ya había sido llamado a juicio por su presunta relación con el exdirector de Invías Daniel García Arizabaleta y una supuesta reunión en la que participaron miembros de la campaña de Santos Presidente 2010: entre ellos Orlando Sardi, gerente financiero, y Luiz Bueno, delegado de la constructora brasilera, con el objetivo de definir el apoyo económico a las actividades electorales del entonces candidato.
Sobre estas capturas, el fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, en la noche del lunes mencionó que durante el transcurso de la semana habría resultados de las investigaciones en el caso Odebrecht, que tiene en vilo a funcionarios y exfuncionarios colombianos y extranjeros.
