Buenaventura vivió este viernes el cuarto día de un paro cívico convocado para que el Estado atienda necesidades urgentes en lo social, económico y ecológico.
Al menos diez policías y varias personas, entre estas menores de edad, resultaron heridas en los disturbios ocurrido la noche anterior por las protestas.
Algunas personas circularon por la ciudad portuaria con los rostros cubiertos y gritando arengas en contra del Gobierno que en la tarde de ayer se levantó de la mesa de diálogos debido a los desórdenes registrados.