Luego de que se emitiera la condena de más de 51 años de cárcel contra Rafael Uribe Noguera por el rapto, violación y asesinato de la niña Yuliana Samboní, se conoció una carta en la que el hoy condenado pide perdón por los hechos ocurridos el 4 de diciembre del año anterior.
En la misiva, escrita aparentemente de puño y letra de Uribe Noguera y conocida por Caracol Radio, dice lamentar 'profundamente' la muerte de la pequeña y lo que ello 'representa' y 'el sufrimiento de la familia Samboní.
'Les expreso mi más grande anhelo de que nada parecido se repita nunca (…) mi verdadero y único deseo en estos momentos es que la juventud y todas las personas sean conscientes del flagelo que causan las drogas y el alcohol en la sociedad, en las personas y en su alma (…) el peor error de mi vida fue entrar en ese infierno en la Tierra y no haber logrado salir de él', escribió el arquitecto bogotano, de 38 años de edad.
'Desde el mismo instante que pasaron los hechos de los cuales me desconozco a mí mismo, y hasta este momento, he esperado que se aclaren los hechos y que sea la verdad la que salga a la luz haciendo que la justicia prime sobre todo', señaló el condenado.
'No tiene perdón de Dios'
Ante la misiva, el padre de la pequeña Yuliana, Juvencio Samboní, advirtió a la citada emisora: 'No fue poquito lo que le hizo a mi hija y para que no siga pasando eso con los demás niños de Colombia creemos que hay que elevar la condena a 60 años'. Y sentenció: 'Una persona de esas no tiene perdón ni de Dios'.
Fallo apelado
La jueza 35 de conocimiento de Bogotá condenó este miércoles a Uribe Noguera a 51,8 años de cárcel y a una multa de $71 millones por el secuestro, violación y feminicidio de Yuliana. No obstante, la Fiscalía y las víctimas apelaron el monto de la pena.
En su lectura de fallo por los delitos de feminicidio agravado, acceso carnal violento agravado contra menor de 14 años y secuestro simple agravado, la togada señaló: 'A una niña de tan solo 7 años de edad se le privó de su libertad, se le instrumentalizó, cosificó y luego su cuerpo se desechó'.
Agregó que Uribe 'exaltó su líbido con la ingesta de estupefacientes, analizó y escogió las circunstancias de su crimen, buscó hasta encontrar una menor de edad aprovechándose de una escasa respuesta institucional. Era un escenario bajo su control, se aprovechó de su ingenuidad, el procesado falseó las primeras informaciones y pretendió encubrirse'.
Lea aquí la carta
Queridos míos
Desde mi corazón y con todo mi amor les pido perdón por el 4 de diciembre de 2016.
Lamento profundamente la muerte de Yuliana y lo que ella representa, el sufrimiento de la familia Samboní y les expreso mi más grande anhelo de que nada parecido se repita nunca (…) mi verdadero y único deseo en estos momentos es que la juventud y todas las personas sean conscientes del flagelo que causan las drogas y el alcohol en la sociedad, en las personas y en su alma (…) el peor error de mi vida fue entrar en ese infierno en la Tierra y no haber logrado salir de él.
Desde el mismo instante que pasaron los hechos de los cuales me desconozco a mí mismo, y hasta este momento, he esperado que se aclaren los hechos y que sea la verdad la que salga a la luz haciendo que la justicia prime sobre todo.
Rafael Uribe Noguera