Luego de que la Fiscalía, la Procuraduría y las víctimas apelaran ante el Tribunal Superior de Bogotá la polémica absolución de Laura Moreno y Jessy Quintero en el caso Colmenares, la defensa solicitó a esta misma corte que se confirme en su integridad el fallo de la jueza 11 de conocimiento de la capital, Paula Astrid Jiménez, y que se investigue 'por presunto fraude procesal a la fiscal del caso, Sandra Jeanette Castro, y al abogado Jaime Lombana, representante de las víctimas'.
Según Pedro Enrique Aguilar y Jaime Granados, defensores de Moreno, 'tanto la fiscal Castro como el abogado Lombana tratan de engañar a la justicia usando la sentencia del Tribunal de 2014 en la que se absolvió a Carlos Cárdenas -y en la que se dictaminó que la muerte de Luis Andrés Colmenares fue un homicidio- y que se prohibió usar en el proceso contra Moreno y Quintero'.
En respuesta a la apelación que presentaron hace un par de semanas la Fiscalía, la Procuraduría y Lombana contra el fallo absolutorio de la jueza Jiménez, los legistas señalan que 'no se entiende ahora cómo los apelantes en sus llamadas sustentaciones del recurso utilizan la sentencia de segunda instancia proferida por el Tribunal Superior de Bogotá el 7 de octubre de 2014, a sabiendas de su prohibición, tratando de engañar la justicia. Más que un acto de deslealtad, configura una típica actividad delictiva que se llama fraude procesal'.
Por ello, los defensores radicaron un escrito de 88 páginas en el que recuerdan que 'la misma jueza llamó la atención de manera categórica tanto a Lombana como la fiscal Castro para que no usaran esa sentencia de 2014 del Tribunal; igualmente, que en una tutela que falló la Corte Suprema de Justicia en noviembre de 2014 dentro de este mismo proceso, se dijo que la sentencia del Tribunal no conllevaba ‘efectos vinculantes… de la presunta responsabilidad penal de quien, dentro de dicha actuación procesal (juicio a Cárdenas), no fue juzgada’, refiriéndose a Laura Moreno'.
Cuestionó la defensa de Moreno que la apelación 'se haya dirigido más a atacar a la jueza que a la decisión' e insisten en que 'la Fiscalía sí cambió el contenido de su acusación contra Laura Moreno, frente a lo que expuso en las audiencias y en la misma apelación (cambio de imputación fáctica), por lo menos en tres aspectos'.
Además, advierten Granados y Aguilar que 'la Fiscalía, Procuraduría y el abogado Lombana tienen tres acusaciones distintas: la Fiscalía, que Luis Andrés Colmenares siempre estuvo dentro del túnel (box culvert) y que Laura Moreno dejó su muerte al azar; la Procuraduría que el cuerpo sí fue llevado a otro lugar y posteriormente ubicado al interior del túnel. Y el abogado Lombana: que Laura era ‘garante’ y por ello la ‘única persona que podía pedir suspender la golpiza y en todo caso socorrerlo cuando cayó o lo empujaron al caño… sin realizar acción alguna para impedir su posterior muerte luego de ser abandonado en el canal'.
Así mismo, la defensa señala que 'con las fotografías del propio Máximo Duque (perito forense de la Fiscalía), resaltan los errores en el procedimiento y las fracturas creadas por el mismo forense al cuerpo en la exhumación'.
Y agregan que 'no existen contradicciones ni incongruencias de Laura Moreno en sus declaraciones, pues quienes manifiestan que ella dijo algo distinto, no lo escucharon directamente sino de terceros'.
