El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) confirmó ayer que ya comenzaron las operaciones para la salida de los menores de edad que se encuentran en las filas de las Farc. Los miembros de esta guerrilla que se acogieron al proceso de paz con el Gobierno están íntegramente en las 26 zonas de reunión en que dejarán las armas.
Aunque en la misiva no se precisó cuántos niños y niñas serán entregados, la alta consejera para los Derechos Humanos, Paula Gaviria, ha asegurado que el Gobierno ya cuenta con información de por lo menos 50 menores. Sin embargo, no hay precisión aún sobre esta cifra: días antes de las declaraciones de Gaviria, la guerrilla entregó un listado de 13 menores que están en sus filas, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, dijo que habrían 170 menores, pero, el jefe guerrillero ‘Pastor Alape’ ha insistido en que no son más de 25.
El proceso
Las operaciones fueron posibles gracias a las reuniones entre el Gobierno Nacional y las Farc en las últimas semanas y se desarrollarán en distintos puntos del país con la participación de varias organizaciones sociales designadas, indicó el CICR en un comunicado.
Un equipo de médicos de esa entidad se encargará de verificar que el estado de salud de los adolescentes sea adecuado para su traslado al lugar donde los recibirá el equipo de Unicef -que operará los 10 lugares transitorios de acogida-, un delegado de la Consejería Presidencial para los Derechos Humanos y los representantes del Consejo Nacional de Reincorporación.
A cargo de Unicef, los menores serán sometidos a una segunda valoración médica y psicológica. Superada esa fase, recibirán actividades preparatorias para su reincorporación, reparación integral e inclusión social.
En este sentido, el CICR aseguró, además, que ofrecerá su ayuda para que los menores puedan reestablecer el contacto con sus familiares.
Punto álgido
Tanto en las tratativas del acuerdo de paz, como en su actual implementación, el tema de los menores que están en las filas de las Farc ha sido un punto álgido. El Gobierno ha insistido en que se dé a conocer cuál es la cifra exacta, pero la guerrilla se ha mantenido hermética al respecto.
Lo anterior, entre otras cosas, sirvió de argumento a los opositores al acuerdo de paz para desvirtuar la voluntad de paz de la guerrilla y acusar al Gobierno de haber sido flexible al negociar y no exigir antes la liberación de los menores.
Vale recordar que antes de llevarse a cabo el plebiscito para refrendar lo convenido en el primer acuerdo de paz, la guerrilla entregó dos grupos de menores de edad (primero, uno con ocho niños y, luego, otro con cinco).
Cicr pide discreción
Aunque el CICR sostuvo que comprende el interés de los medios de comunicación y de la sociedad en general de conocer ampliamente este proceso, pidió 'encarecidamente' que se respeten las medidas preventivas tomadas para preservar la identidad de los menores.
'La discreción es un factor clave para el éxito de este tipo de operaciones humanitarias, especialmente cuando se trata de situaciones que involucran a menores de 18 años', advirtió.
