Las investigaciones siguen avanzando en el caso de la pequeña Yualiana Samboní, quien hace 11 días fue hallada sin vida en un apartamento de la localidad de Chapinero, de Bogotá.
A las pesquisas hechas con relación a los hermanos del confeso homicida, Rafael Uribe; a las que se adelantaron en torno al suicidio ya comprobado por Medicina Legal de Fernando Merchán, vigilante del edificio Equus 66, donde fue asesinada la menor; y a otras más se suma ahora un nuevo capítulo que este miércoles abrió la Fiscalía.
El ente acusador ordenó investigar a las unidades de Policía Judicial que han estado participando en la recopilación de todo el material probatorio que permite determinar la ocurrencia de la conducta punible.
'La Fiscalía General de Nación deplora que evidencia física que forma parte de la investigación de la niña se encuentre por fuera del expediente, tanto más cuando la víctima es un menor de edad que es sujeto de especial protección por la Constitución y la ley', explicó la Fiscalía en un comunicado.
El organismo enfatizó en que 'hechos de tal naturaleza revictimizan a su familia y a la sociedad'.
El fiscal general Néstor Humberto Martínez reprochó el hecho de que los investigadores hayan descuidado las pruebas, cuando tenían la responsabilidad de resguardarlas.
Si se logra estableces que efectivamente los agentes incumplieron sus labores serían separados inmediatamente de las funciones de policía judicial.