El sábado 11 de octubre de 2013, agentes del CTI capturaron en Barrancas, La Guajira, al entonces gobernador de ese departamento, Juan Francisco ‘Kiko’ Gómez Cerchar. Y casi no lo capturan, pues llegaron esa noche unos 150 seguidores en una treintena de vehículos, decididos a impedir la detención, y ayudados además por decenas de uniformados de la Policía.
Tres días después el CTI lo trajo a Bogotá, sonriente y con las vendas en la mano por la hospitalización de la que fue objeto en la Clínica del Cesar, en Valledupar.
Cinco meses después, el 26 de febrero de 2014, el presidente Santos aceptó la renuncia del gobernador a través del decreto 420. Entre tanto, Gómez iniciaba una estrategia de defensa, pues su equipo jurídico había denunciado ya en cuatro ocasiones a la entonces fiscal cuarta delegada ante la Corte Suprema, Martha Lucía Zamora porque, supuestamente, había presionado a los testigos.
El 25 de septiembre de 2014, la Fiscalía, en medio del documento suscrito por la actual fiscal cuarta delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Yenny Claudia Almeida Acero, acusó a Gómez por homicidio agravado, tentativa de homicidio, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego y tráfico y porte de armas y municiones de uso privativo de las Fuerzas Armadas.
Las muertes que se le endilgaron: la de la alcaldesa de Barrancas, Yandra Brito; su esposo, Henry Ustáriz y su conductor, Wilfredo Fonseca.
Crímenes de Ustáriz y Fonseca
En la acusación se lee que una ráfaga de disparos desde las partes delantera y trasera de una Ford Explorer azul segaron las vidas de Henry Ustáriz Guerra y de Wilfrido Fonseca Peñaranda a las 11 de la mañana del 2 de abril de 2008, en la vía entre Fonseca y Barrancas.
Ustáriz, quien era esposo de la entonces alcaldesa de Barrancas, Yandra Brito, fue asesinado tras 'una reunión en la que se acordaron y dispusieron los pormenores del plan criminal. Reunión en la que Juan Francisco Gómez Cerchar participó de manera activa', se lee en el escrito.
Asesinato de Brito. Brito, por el crimen de su esposo, interpuso una denuncia el 8 de julio de 2008 en la que aseguró que el autor intelectual era Kiko Gómez. La excaldesa expuso en sus motivos que 'había recibido amenazas provenientes de esta persona' a través de 'intermediarios', entre los que se señala a 'Juan León Solano, exalcalde de Barrancas, actualmente privado de la libertad, y Augusto Hernández Ureche, expresidente del Concejo de Barrancas'.
Se lee además en la acusación: 'la denunciante refirió que Gómez Cerchar le mandó a decir que para matarlo tendría que conseguir gente en Cali o Medellín, porque todos los sicarios de la zona de La Guajira eran amigos de él'.
Tras una pesquisa que hizo por sus propios medios, la viuda le dijo a la Fiscalía que el exgobernador le estaba exigiendo una fuerte suma de dinero a su esposo, que el crimen lo planearon Yesid Martínez, alias Perra Ñata; John Amaya y Paul Corrales, sobrino de alias Marquitos, y que el traslado del armamento se hizo con la ayuda de un sargento del Ejército conocido como Veneno, y que todo esto se lo contó alias Kike, del esquema de seguridad de Gómez.
El ente acusador encontró que el exgobernador apoyó a Brito en su campaña a la Alcaldía de 2004 a 2007, y en contraprestación le habría exigido cuotas económicas y burocráticas, pero ella se negó, y quien la incentivó a negarse fue su esposo. Por esta razón el mandatario le habría pedido una fuerte suma de dinero. Pero no pagó y Kiko Gómez se reunió con Marquitos y le pidió atentar contra Ustáriz, se lee en el documento.
Así las cosas, al mediodía del 28 de agosto de 2012, varios sicarios asesinaron a Brito cuando hacía diligencias en Valledupar.
Agrega la Fiscalía que Gómez ordenó el crimen de Brito porque esta estaba 'haciendo contactos con personas para que atentaran contra el exgobernador, entre ellos el grupo comandado por Arnulfo Sánchez, alias Pablo o El Señor del Desierto y con Los Rastrojos'.
Pruebas y testimonios
Contra Gómez la Fiscalía anexa como material probatorio 105 documentos y 102 testimonios.
Entre los testimonios se encontraba el de Wílber Hernández, hermano de Martha Hernández, conocida como ‘La Chachi’, amiga de Brito y asesinada en Santa Marta, cuyo testimonio era 'importante porque su hermana le manifestó al testigo que Gómez le había dicho que la iba a matar a ella y a Yandra'.
Otro es el de Neda de Jesús Carrillo Moscote, madre de Brito, quien denunció que el 24 de marzo de 2011 amenazas en contra de su familia por parte de Gómez, y reiteró su responsabilidad en la muerte de Ustáriz. También el de Saúl Brito, hermano de la víctima, quien llevó a su hermana a un encuentro en Edwin Enrique Cortés, alias Kike, 'quien le contó a Yandra cómo fue la planeación del asesinato de su esposo', pero quien luego 'fue objeto de presiones de Kiko para que no diera esta versión, e incluso narrará que el exgobernador presionó a otros testigos para que no hablaran'.
Igualmente, el ente investigador pidió incluir en la lista de testigos a Arnulfo Sánchez González, alias Pablo o El Señor del Desierto, quien perteneció a las AUC y está extraditado en los EEUU; el periodista Gonzalo Guillén, quien investigó a Gómez y entrevistó a Brito; Rosario Sierra de Hernández, madre de La Chachi; Danilo Gómez, sobrino de Brito y Fabián Amaya, testigo presencial de una reunión en que se planeó el homicidio de Ustáriz.
Como pruebas documentales se destacaron las declaraciones que rindió el 13 de septiembre y el 1 de octubre de 2012 Rafael Arroyo Geles, quien luego desapareció en extrañas circunstancias, pero antes contó que conocía de la comisión del crimen contra Brito y sobre la banda criminal que lo cometió: 'Arroyo narró el conocimiento que tenía de la comisión del homicidio, informó acera de los autores materiales y la vinculación de los mismos con una organización criminal'.
Del mismo modo, se solicitó tener en cuenta la denuncia presentada por Brito el 8 de julio de 2008, donde señala a Kiko Gómez como el responsable del crimen de Ustáriz.
La denuncia de Brito
El 27 de abril de 15, la Fiscalía presentó la entrevista y la declaración que alcanzó a rendir la asesinada exalcaldesa de Barrancas, en que denuncia el crimen de su esposo, nexos de Gómez y alias Marquitos, desfalcos a los recursos públicos de la península y sospechosos archivos de los procesos contra el exgobernador.
Se escuchó en medio de la audiencia el audio de la declaración en que la propia víctima alcanza a narrar la primera supuesta amenaza de Gómez: 'en un momento se puso tan difícil, haciéndome exigencias económicas para que garantizara con dineros del municipio la ayuda a los candidatos de su preferencia, (...) y en 2007 para que le aportara dinero a la campaña a la Asamblea de su esposa Bibiana Bacci (...). Le dije que no tenía dinero, y no me volvió a molestar, pero luego me exigió otra vez, y le dije que no, y me amenazo por primera vez diciéndome que esto no se quedaba así y que yo se las pagaba'.
Brito también aseveró que -según la información paga que le dio uno de los escoltas de Gómez Cerchar, alias Kike- el exgobernador 'mata a mi esposo un 2 de abril de 2008 y (...) el comentario era que lo había hecho matar con la banda que dirigía Marcos Figueroa, y había unos sicarios que se llamaban alias la Perra Ñata, Yesid Martínez, y al otro le decían El Pilo, pero que también se desenvolvían en el Atlántico en una banda dirigida por un señor llamado Gaby Daza'.
Finalmente, contó: 'yo solicité que el caso lo manejaran en Bogotá porque Gómez Cerchar tiene mandos medios en todos los organismos de control y es increíble que un tipo que haya participado en tantas cosas mal hechas aparezca como si no tuviera delito alguno (…). Que Gómez esté aspirando a la Gobernación es una falta de respeto contra un pueblo'.
Celebración en Barranquilla
El 18 de junio de 2015, en medio del juicio, Francisca Sierra, la madre de 81 años de Martha Hernández, quien era conocida como La Chachi antes de ser asesinada, afirmó que, más o menos, en 2008 'mi hija me contó que Kiko Gómez le dijo que la iba a matar a ella y a Yandra'.
Hernández fue asesinada en Santa Marta el 19 de noviembre de 2012, 'y después de muerta mi hija me llamaron a amenazarme, riéndose a carcajadas, que ya me la habían matado (…). Yo no creía que Kiko Gómez tenía esa serpiente en el estómago, él es la copia de Satanás'.
Luego la Fiscalía exhibió un video de la declaración jurada que rindió en Valledupar, el 13 de septiembre de 2012, Rafael Arroyo Geles, encargado de contactar a los sicarios que asesinaron a Brito y sobre quien nunca se volvió a saber nada desde el 17 de octubre de 2012, tras las capturas de los presuntos autores materiales, que se produjeron el 3 de octubre de ese año.
'El 18 de agosto de 2012 llegaron ellos desde Barranquilla hacia Valledupar a asesinar a la señora Yandra, allá se contactaron con alias Norte (sobrino de alias Marquitos y capturado junto con el capo en Brasil a finales de 2014), para que este les diera las coordenadas, las armas, que eran unas 9 mm de 15 tiros con selector, y las motos', contó Arroyo.
Tras el asesinato, narró, los sujetos se devolvieron a Barranquilla 'haciendo fiesta, comprando ron, haciendo sancocho, comprando motos, repartiendo plata y diciendo que había salido bien la ‘vuelta’ de la señora Yandra'.
Sicarios no lo conocen
El 8 de septiembre de 2015, Édgar Salazar y Carlos Pérez Jiménez, presuntos sicarios del crimen contra de Brito, aseguraron que no conocían al exgobernador.
Ambos testigos, barranquilleros y presos en Valledupar, aseveraron, en cambio, que la exfiscal Martha Lucía Zamora, quien llevaba inicialmente el caso, les ofreció 'beneficios' a cambio de que le 'colaboraran'. Y aunque admitieron que nunca se reunieron con la exfiscal, aseveraron que ella 'les mandaba razones' con los guardianes del Inpec.
Piden condena
El 2 de noviembre pasado, en medio de los alegatos finales, la Fiscalía, la Procuraduría y la representante de víctimas pidieron la condena contra Gómez Cerchar, mientras que la defensa del exmandatario pidió su absolución. La defensa aseveró que 'de lo que se trató este juicio fue de empapelar a Juan Francisco Gómez a como diera lugar'.
El juez, entonces, regañó al abogado porque llevaba ocho horas de intervención y había presentado apenas 550 diapositivas de 1.066.
Y en un duro tono, le advirtió el togado: 'mi fallo será de 10 minutos, y será mi fallo, no tengo compromisos con nadie y asumo las consecuencias que me genere'.
Esta semana, el juez 8 especializado de Bogotá, ante la torrencial evidencia de las pruebas, condenó a Gómez Cerchar y anunció que tasaría la pena en enero próximo.
'131 homicidios'
Dos días después, el periodista y escritor Gonzalo Guillén, quien investiga al exmandatario desde 2012, advirtió que la lista de homicidios en que estaría involucrado Gómez Cerchar, junto con Marcos Figueroa, alias Marquitos, suma 131 personas.
El periodista, quien contó que la Policía le había informado que el exgobernador estaría ofreciendo $1.000 millones por su cabeza, señaló: 'en agosto de 2012 me llamó una señora, Yandra Brito, a decirme que el gobernador de La Guajira la iba a asesinar, que había asesinado al marido (Ustáriz) y que sus dos hijos iban a quedar huérfanos de padre y de madre'.
Tras el asesinato de Brito, narró, 'me fui a La Guajira e investigué, y con todo el material que reuní hice un documento de 22 páginas y se lo entregué al fiscal general, ya que todos los delitos habían desaparecido de los archivos judiciales'.
Guillén advirtió entonces: 'faltan muchos procesos porque la lista de homicidios suma 131', y agregó que 'esos homicidios los constaté con testigos y parientes de víctimas, con quienes me he reunido y me he dedicado nombre por nombre a recoger toda la información'.