El Gobierno colombiano reforzó la labor para evitar el tráfico ilegal de ranas doradas, especie en peligro de extinción y catalogada como el vertebrado más letal del mundo porque a través de su piel se extrae una toxina que es usada como un potente analgésico, informaron hoy fuentes oficiales.
Para reforzar su estrategia se incrementaron los controles en los puertos, puestos terrestres y aeroportuarios de Colombia, además de la realización de jornadas de sensibilización ambiental, indicó el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible en un comunicado.
El Pacífico, la región Andina y la Amazonía, son las zonas donde se encuentran principalmente esos anfibios.
Las autoridades han identificado nueve corredores en los cuales se reconoce la existencia de vías de comunicación aéreas, marítimas y terrestres que facilitan el tráfico ilegal de las ranas doradas, agregó la información.
En esos corredores, las autoridades ambientales realizarán mayores controles para mitigar el tráfico de los batracios.
Las ranas son enviadas a diversos países de Europa, Canadá, Japón y Estados Unidos donde son apreciadas por los laboratorios por sus toxinas.
En este sentido, el ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, comentó que es difícil contrarrestar el tráfico de estas ranas porque 'en la adultez su tamaño puede llegar los 55 milímetros'.
Eso 'facilita su transporte, ya que incluso se puede llevar en un bolsillo humedecido, lo que la hace imperceptible al olfato de los caninos o a los controles de rayos X'.