'El Gobierno no va a volver a asperjar. Eso que quede claro', afirmó Santos al intervenir en Bogotá en el Gran Foro de la Biodiversidad.
El gobernante señaló que la decisión se adoptó para dar cumplimiento a un fallo de la Corte Constitucional y tras una investigación sobre la implicación de las fumigaciones en la salud humana y pública.
En mayo de 2015, el Consejo Nacional de Estupefacientes ordenó la suspensión del uso del glifosato, cumpliendo con una orden de la Corte Constitucional de detener la utilización de ese herbicida ante la posibilidad de que pueda causar graves daños a la salud y ser potencialmente cancerígeno, como denunció la Organización Mundial de la Salud (OMS).
'Llevamos treinta o cuarenta años en la vanguardia de la guerra mundial contra las drogas', afirmó el mandatario, e indicó que 'Colombia ha sido el país que más sacrificios ha hecho de todo el planeta'.
El jefe de Estado se pronunció después de que el fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, defendió la semana pasada en Washington la reactivación de la fumigación aérea aunque puntualizó que esta propuesta no incluye la aspersión con el herbicida glifosato.
Santos indicó que el país ha combatido 'toda la cadena' del narcotráfico y lamentó que no haya 'logrado dejar de ser el primer exportador de cocaína a los mercados mundiales en ningún año'.
Además se refirió al acuerdo de paz que su Gobierno firmará el próximo 26 de septiembre con las FARC después de cuatro años de negociaciones en La Habana y que pondrá fin a más de cinco décadas de conflicto armado.
'Ahora, con el fin del conflicto, por primera vez vamos a tener la oportunidad de una solución estructural', indicó Santos, quien destacó que el cese de la confrontación 'implica la posibilidad de consolidar una nueva economía' en la que, además de sacar un mayor provecho de los recursos, se reivindique el 'medio ambiente'.
Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), los cultivos de coca en Colombia se han duplicado en los últimos dos años hasta alcanzar las 96.000 hectáreas, una cifra que no registraba desde 2007 y que sitúa al país como principal productor de cocaína de América Latina.
En una notificación enviada el lunes al Congreso por el presidente de EEUU, Barack Obama, Colombia permaneció en la lista de países a los que Washington califica de 'grandes' productores o de tránsito de drogas.
El informe señala que el cultivo de cocaína en Colombia, el principal abastecedor de EEUU, ha crecido en un 42 % entre 2014 y 2015, y también han aumentado las hectáreas sembradas de amapola.