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De puertas para adentro, en el Salón Elíptico del Congreso de la República, la Cámara de Representantes decidió, al cabo de dos largas horas de plenaria reservada, aplazar la decisión de acusar o no ante el Senado al magistrado de la Corte Constitucional Jorge Ignacio Pretelt Chaljub por el presunto punible de concusión. Lo anterior, mientras la Comisión de Ética resuelve varias recusaciones contra algunos parlamentarios que interpuso la defensa del investigado.

Las recusaciones pesan sobre los representantes Germán Navas Talero, Angélica Lozano. Arturo Yepes, Alirio Uribe, Ángela María Robledo y Rodrigo Lara, quienes prejuzgaron a Pretelt Chaljub a través de las redes sociales y distintos medios de comunicación, según lo argumentó el abogado Abelardo de la Espriella, representante del magistrado cordobés.

El jurista Carlos Germán Navas Talero, uno de los parlamentarios recusados, le dijo a El Heraldo que la plenaria de la Cámara sí era competente para resolver las recusaciones y que, por lo tanto, lo que se hizo fue 'voltear la torta para cambiar de tema y demorar la decisión. Fue una tinterillada, una tramoyita', sentenció.

Para la representante Tatiana Cabello Flórez lo que hizo la plenaria en este caso no fue una maniobra dilatoria sino dar cumplimiento a los recursos legales. 'No podemos saltar la ley y es la Comisión de Ética la que debe decidir si las recusaciones son válidas o no', dijo la legisladora del Centro Democrático.

Entre tanto, el representante investigador Hernando José Padauí Álvarez explicó que el caso Pretelt es delicado y concita los ojos de la Nación, razón por la cual hay que actuar dentro los términos legales para no incurrir en un posible prevaricato.

Padauí Álvarez afirmó: 'Debemos esperar a que la Comisión de Ética decida para poder tomar una decisión tranquila. Era necesario aplazar el debate porque no había claridad frente a los impedimentos de algunos representantes'.

Sobre el debate reservado en la plenaria, agregó el parlamentario bolivarense que algunos representantes conocieron algunos de los recursos, por lo cual estaban exigiendo al presidente de la Comisión de Investigación y Acusaciones, Julián Bedoya que él las resolviera, decisión que finalmente no se dio, y que ahora está en manos de la Comisión de Ética.

El magistrado Jorge Ignacio Pretelt había sido acusado por la comisión que preside Bedoya ante la Cámara por presuntamente pedir dinero para favorecer el fallo de una tutela en beneficio de Fidupetrol.

'Es un servidor público y además un magistrado de la Corte Constitucional. Dadas esas calidades, el estándar de exigencia legal y moral de comportamiento en su caso es mucho más alto que el de un ciudadano cualquiera', reza uno de los apartes del escrito de acusación ante la Cámara.

Habla la defensa de Pretelt

Sobre las recusaciones interpuestas, el abogado Abelardo de la Espriella explicó a este medio que los representantes citados, a cuya lista anterior se suma Óscar Ospina Quintero, dieron opiniones en las redes sociales que 'claramente vulneran la presunción de inocencia del magistrado Jorge Pretelt', en otras palabras, agregó, 'quienes son investigadores de mi cliente lo prejuzgaron antes de que el proceso llegara a sus manos'.

Para De la Espriella, en la discusión de acusación contra el magistrado no pueden participar quienes hayan emitido «juicios apresurados e irresponsables sin ni siquiera conocer el expediente». Recordó que en este caso los parlamentarios cumplen funciones judiciales y no políticas.

Sobre las maniobras dilatorias sobre las que hizo referencia el representante Navas Talero, el jurista cordobés afirmó que el también abogado «piensa con el deseo y con las ganas de hundir a Pretelt. Es increíble que un congresista de la experiencia y la trayectoria jurídica de Navas Talero, desconozca de manera flagrante lo preceptuado por la Ley 5». Según explicó De la Espriella, la ley establece que los impedimentos son resueltos por la plenaria, pero que en el caso de las recusaciones, la competencia es de la Comisión de Ética.