A pesar de que la Corte Constitucional había anunciado el pasado lunes un 'ejercicio público de rendición de cuentas' para hoy, en realidad la sesión será privada durante la mañana y luego será retransmitida por el Canal Institucional en la tarde.
La rendición de cuentas, que incluiría un reporte de gestión de la Corte de 2009 a 2015, un informe de coyuntura sobre casos relevantes de especial interés público y respuestas individuales de los magistrados sobre aspectos de actual interés para la opinión pública, se iniciará a las 8 de la mañana y los medios de comunicación no tendrán acceso.
En la sesión, cada uno de los nueve magistrados será grabado durante cinco minutos por el Canal Institucional, y en este tiempo se espera que respondan por los señalamientos que les hizo el presidente del alto tribunal, Jorge Pretelt, denunciado a su vez por soborno, tráfico de influencias y despojo de tierras.
Los señalamientos de pretelt
El cordobés dijo, por ejemplo, que los magistrados que habrían sido favorecidos por el fiscal Eduardo Montealegre con nombramientos fueron el barranquillero Gabriel Mendoza, Jorge Iván Palacio, Luis Ernesto Vargas y Gloria Stella Ortiz. Y agregó que en los despachos de sus colegas desfilaban abogados y exmagistrados haciendo 'lobby' por tutelas. Tanto el fiscal como los cuatro togados están siendo investigados por la Comisión de Acusaciones tras una denuncia de la Red de Veedurías.
Los ciudadanos que tengan preguntas para los juristas deberán presentarlas ante la Corte Constitucional para que sean respondidas el próximo 17 de abril, a través de un mecanismo por establecerse.
Se ignora si Pretelt acudirá a la rendición de cuentas, pues a esa misma hora está citado en la Comisión de Acusaciones por las múltiples denuncias en su contra.
Polémica por Tribunal de Aforados. Aunque el presidente Juan Manuel Santos anunció el martes que en la reforma constitucional en trámite habría 'más dientes' para el Tribunal de Aforados que reemplazaría a la Comisión de Acusaciones de la Cámara, varias voces en contra surgieron ayer en el Congreso ante la propuesta.
El jefe de Estado explicó que el tribunal no solo investigaría, sino que también acusaría ante el Congreso en pleno a los altos funcionarios aforados, como el fiscal y los magistrados, 'y el Congreso, en un término perentorio, evaluará la conveniencia de dar trámite a la acusación'.
Agregó que esta corte 'será un tribunal técnico elegido por un concurso de méritos, compuesto por personas idóneas en las labores de investigación'.
No obstante, la senadora de la Alianza Verde, Claudia López, criticó que el mismo tribunal no juzgue a los aforados: 'se debe separar completamente el juicio político de los aforados del juicio penal (…). Este será el único tribunal en el mundo que no juzgue'.
Por su parte, el senador barranquillero de La U, Armando Benedetti, dijo que los dientes del tribunal son de 'leche', porque 'un verdadero Tribunal de Aforados debería investigar, acusar y juzgar en primera y segunda instancia'.
Corte Suprema juzgaría a los aforados sin que pasen por el Congreso
En el proyecto de segunda ponencia de la reforma al equilibrio de poderes se estableció que el Tribunal de Aforados que sería creado podrá acusar directamente ante la Corte Suprema de Justicia, por causas penales, a los magistrados de las altas cortes o los fiscales generales, sin tener que hacerlo ante el Congreso, como se había previsto inicialmente.
Al respecto, el senador barranquillero de La U, Armando Benedetti, explicó que el Congreso solo conocerá los procesos por indignidad política, en los que podrá suspender o destituir a los altos funcionarios, tras la investigación que realice el Tribunal de Aforados.
Agregó el parlamentario que en la ponencia salieron del grupo de aforados el contralor y el procurador, quienes seguirán siendo investigados y acusados por el fiscal general y juzgados por la Corte Suprema.
A su vez, la senadora de la Alianza Verde, Claudia López, precisó que el presidente y vicepresidente serán los únicos altos funcionarios con juicio político, y serán investigados por una comisión accidental que cree el Congreso en pleno.
Por su parte, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, confirmó que el primer Tribunal de Aforados funcionará durante dos años con los cinco magistrados nominados por el presidente de la República y ratificados o negados por el Congreso.
Tras esos dos primeros años, una Dirección de la Magistratura, que también será creada, escogerá los nombres de los cinco togados por concurso de méritos y finalmente serán elegidos por el Parlamento para un periodo de ocho años.
Por ahora, la ponencia para segunda vuelta, que empezaría a discutirse la próxima semana, cuenta con las firmas de las colectividades políticas de la Unidad Nacional y la Alianza Verde, y por fuera se declararon el Polo y el Centro Democrático.
Los aforados serían los magistrados de la Corte Constitucional, la Corte Suprema de Justicia, el Consejo de Estado y el fiscal general.
Caso Pretelt, al tribunal
El ministro Juan Fernando Cristo consideró que el caso Pretelt, como la mayoría de procesos contra altos funcionarios, serían conocidos por el Tribunal de Aforados, ya que si en un año no hay avances en la pesquisa contra el togado cordobés, 'pasaría al Tribunal de Aforados'.
Por su parte, el ministro de Justicia, Yesid Reyes, dijo que el Tribunal de Aforados estaría funcionando en unos seis meses o un año 'y es la única manera de acabar con la ineficacia de la Comisión de Acusaciones'.
Sobre las otras medidas anunciadas por Santos para sortear la crisis de la justicia, explicó que la selección de magistrados por meritocracia se haría al menos con seis meses de antelación a la finalización del periodo del togado saliente.
Dijo, además, que el presidente podría proponer nombres para vestir las togas pero que ese proceso será público, con unos requisitos establecidos, y por méritos se haría la selección.
