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El postulado de Justicia y Paz Edgar Ignacio Fierro Flórez alias don Antonio, principal testigo de la Fiscalía en la investigación por soborno contra Silvia Beatriz Gette Ponce y Arcadio Tobías Martínez Pumarejo, declaró en la apertura del juicio ratificando que le ofrecieron 500 millones de pesos para sembrar dudas sobre los autores del crimen de Fernando Cepeda, pero advirtió que lo único que le consta es que al frente José Pablo Díaz de las AUC le entraron 150 millones de pesos por ese homicidio.

El declarante afirmó que la primera vez que se reunió con Arcadio Martínez fue en diciembre de 2012 y que previamente habían sostenido conversaciones a través del chat de Blackberry. Relató que fue en enero 18 de 2013 cuando tuvo la visita de Martínez, y que ese mismo día, ayudado de un computador y un Ipod de uso personal, grabó la conversación que posteriormente copió en un CD.

Según el excomandante paramilitar, decidió grabar la charla porque 'ya sabía cuál era el objeto de la visita' de quien en ese momento ejercía como apoderado de Silvia Gette. Alias don Antonio se sostuvo en que el objeto del presunto soborno era el de sembrar dudas respecto a los determinadores del homicidio ocurrido en agosto de 2003 cerca de Barranquilla.

Como ya se ha conocido en este proceso, el CD original que se convertía en la principal prueba para inculpar a Gette Ponce y Martínez Pumarejo, apareció destruido en el ente acusador. Sin embargo, las partes tienen copias espejo de dicho material de audio; precisamente, apartes de uno de esos duplicados fueron reproducidos en el transcurso de la audiencia, y por solicitud de César Augusto Londoño, apoderado de Martínez Pumarejo.

De acuerdo con lo dicho por Londoño, utilizó el disco compacto con el propósito de refrescar memoria e impugnar la credibilidad del testigo. Fueron pocos y no muy entendibles los fragmentos revelados de la conversación, donde se alcanza a escuchar algo de 'unos relojes'.

Al preguntársele a Fierro Flórez sobre si reconocía las voces de la grabación, afirmó que 'era posible que fueran la suya y la de Arcadio Martínez', pero añadió que no podía asegurarlo porque también conocía la existencia de programas para alterar los sonidos e insertar voces. El postulado de Justicia y Paz, aunque se mantuvo en su denuncia sobre el soborno, reconoció que: 'Nunca he dicho que participé en la muerte de Cepeda, nunca he dicho que me reuní con Silvia Gette'. También negó que se hubiera encontrado con Juan Carlos Rada, en una época, jefe de sistemas de la Universidad Autónoma.

Édgar Fierro afirmó que el hecho de Cepeda lo conoció a través del paramilitar Pedro Soler alias Aguas, quien le reveló que había una persona pagando 150 millones de pesos por la muerte de Fernando Cepeda. Continúa el testigo diciendo que su respuesta en ese entonces fue la de elevar consulta ante el comandante Rodrigo Tovar Pupo alias Jorge 40 con el fin de que autorizara el atentado, como finalmente ocurrió.

Alias don Antonio reiteró que Rafael Julio Peña alias Chiqui fue el primero en hablar del crimen de Cepeda Vargas durante las versiones libres de Justicia y Paz. Además volvió a señalarlo de haber recibido 150 millones de pesos para que cambiara su testimonio no inculpando a Gette Ponce, sino a María Paulina Ceballos, la viuda del ganadero e hija de Mario Ceballos.

Durante su intervención ante la juez 34, Fierro Flórez sostuvo que el contacto con Arcadio Martínez se dio a través de 'el gordo Rosado', según él, 'el único amigo que le quedaba en Barranquilla'. Y que en las conversaciones con el jurista que presuntamente le planteó el soborno, este también le habría ofrecido un dinero adicional para que dijera que Daniel Peñarredonda, abogado de la firma de Abelardo de la Espriella, lo había visitado en la cárcel La Picota para que se mantuviera en su versión de inculpar a Gette Ponce con el homicidio.

En el contrainterrogatorio formulado por Londoño a Fierro Flórez, el primero le indagó por el Blackberry mediante el cual sostuvo las conversaciones por chat con Martínez Pumarejo preguntándole 'por qué no lo entregó como prueba a la Fiscalía', a lo que don Antonio le respondió que en su calidad de recluso a él no le estaba permitido usar teléfono.

Las audiencias continuarán este jueves, cuando se espera la presencia de Silvia Gette en el banquillo de los acusados y la intervención como testigo de David Mostacilla, concuñado de Fierro Flórez y la persona que este designó como emisario para que recibiera el supuesto soborno de manos de Martínez Pumarejo en un centro comercial de Barranquilla, cuando aparentemente se configuró la flagrancia por la que hoy el abogado vallenato enfrenta el proceso penal.