Una misión de científica para cartografiar el océano apoyada por la Unesco ha descubierto frente a las costas de Tahití (Polinesia Francesa) uno de los mayores arrecifes de coral sanos del mundo, a una profundidad de entre 30 y 65 metros.
El hallazgo de este arrecife es muy valioso por sus grandes dimensiones (tres kilómetros de largo y entre 30 y 60 metros de ancho) y por el estado original de los corales en forma de rosas que alcanzan los dos metros de diámetro, informó este jueves la Unesco en un comunicado.
Se trata de un descubrimiento muy inusual porque, hasta ahora, la gran mayoría de los arrecifes de coral conocidos se encuentran a una profundidad de hasta 25 metros, por lo que es muy probable que haya arrecifes de gran tamaño, a más de 30 metros de profundidad, en la 'zona crepuscular' del océano que desconocemos.
'Este notable descubrimiento en Tahití demuestra el increíble trabajo de los científicos que, con el apoyo de la Unesco, amplían nuestros conocimientos sobre lo que hay debajo', destacó la directora general de la organización Audrey Azoulay.