Cinco ballenas francas del Atlántico Norte, una especie en peligro crítico de extinción, fueron encontradas muertas este mes en el Golfo de San Lorenzo, al este de Canadá, informaron autoridades de ese país el jueves.
Los animales sin vida fueron encontrados a la deriva y se les colocó un dispositivo de rastreo satelital. Dos de los ejemplares fueron arrastrados hasta la playa, donde se les practicó una necropsia (examen post mortem).
Una de las ballenas, una hembra de 40 años, era ya conocida por biólogos marinos y había sido bautizada como Punctuation. Se estimó como causa probable de su muerte el impacto contra un barco.
Las autoridades del transporte canadiense reaccionaron con una exclusión de 16.000 km2 para la pesca comercial y la expansión de un límite de velocidad de 10 nudos en el golfo.
Aún no se pudo determinar la causa de muerte de la segunda ballena arrastrada hasta la costa, un ejemplar macho de nueve años a quienes los científicos llamaban Wolverine.
Con estas cinco muertes, y considerando también el nacimiento reciente de siete ballenatos, se estima que la población total de ballenas francas del Atlántico Norte asciende a 413 ejemplares.
Luego de que una docena de ballenas francas fueron encontradas muertas en 2017, el gobierno canadiense ha aumentado el seguimiento de estos mamíferos mediante vigilancia aérea, marítima y monitoreo acústico del océano.
En 2018 no se informó de ninguna muerte de ballenas francas.
La ballena franca del Atlántico Norte se encuentra, según conservacionistas, entre las especies con mayor peligro de extinción del mundo. Durante el verano boreal, un tercio de su población visita cada año aguas territoriales canadienses para alimentarse.