Luego de la denuncia presentada por la alcaldesa de Santa Marta, Virna Johnson, sobre el embargo de las cuentas maestras del Distrito por parte de la Superintendencia Nacional de Salud, a través del hospital Julio Méndez Barreneche, el Comité de Participación Comunitaria en Salud-, Copacos y otros sectores, alzaron su voz de rechazo.
Dicho embargo, que se debió a un proceso de cobro coactivo adelantado por la Supersalud por concepto de facturas derivadas de la prestación de servicios de salud de urgencia a población vulnerable no asegurada, particularmente a los migrantes en condiciones de irregularidad, 'le impide a la Alcaldía de Santa Marta disponer de los recursos de destinación específica, que se necesitan con urgencia para avanzar en la ejecución de todos los programas de salud pública y del plan de vacunación para contrarrestar el contagio del covid-19', según indicó la alcaldesa.
Al respecto, Nataly Villarreal, miembro de los Copacos, dijo estar 'impresionada por la forma en la que están jugando con la salud de la ciudadanía'.
'Rechazo profundamente el hecho de que hayan embargado las cuentas para los programas de la Secretaría de Salud a nivel del Distrito, pues con ello peligran muchos programas sociales, incluso, la vacunación del covid', precisó.
