El desbarrancamiento del terraplén en el puerto del ferry, en Salamina, debido a la socavación por las fuertes corrientes del río Magdalena, dejó sin operación el transporte fluvial de carga entre el Atlántico y Magdalena y viceversa.
Este martes se registró una nueva emergencia, de por sí diagnosticada, pues era de pleno conocimiento de las instancias nacionales y departamentales que esto en cualquier momento iba a suceder.
En este mismo sector, denominado Las Carmelitas, se produjo el 26 de octubre pasado, una erosión que socavó el terraplén llevándose consigo la caseta del ferry.
'No jueguen más con la vida de los salamineros y de todos los municipios que se verían afectados por una inundación y por la parálisis de este servicio de transporte fluvial', dicen los habitantes de este municipio.