La vida de Carlos Martínez, un joven samario de 18 años, fue apagada intempestivamente después que una motocicleta de color rojo y en aparente exceso de velocidad lo atropellara, en la doble calzada Ciénaga-Santa Marta, cuando regresaba caminando junto a su amigo, Alvis Alejandro Franco, hacia la capital del Magdalena.
El trágico suceso se registró hoy domingo pasadas las 5:30 de la mañana, en cercanías a la terminal portuaria de Puerto Nuevo, en el área rural del municipio de Ciénaga, del que partieron los dos amigos poco antes del amanecer.
De acuerdo con Franco, quien reside en el barrio La Esmeralda en Santa Marta, habían viajado el viernes hacia Aracataca para visitar a unos familiares, por lo que emprendieron el regreso a sus casas la noche del sábado.
'Nosotros llegamos hasta Ciénaga en un chance y nos quedamos descansando un rato debajo de un árbol por el sector de la ‘Ye’, de ahí comenzamos a caminar para regresar a nuestras casas, cuando pasó la moto a toda velocidad y atropelló a Carlos', comentó el acompañante del occiso.
Según su relato, el conductor de la motocicleta también cayó al suelo, pero se levantó y se fue del lugar en su vehículo a gran velocidad, dejando pedazos plásticos de ella en el lugar del siniestro junto al cuerpo del joven, que vivía con su familia en el barrio 20 de Octubre, en el Distrito de Santa Marta.
El levantamiento del cadáver estuvo a cargo de criminalistas de la Policía de Tránsito y Transporte, quienes acabado el procedimiento lo trasladaron a la morgue de Santa Marta, donde sería devuelto a sus dolientes tras la necropsia.
