Patricia Paola Cantillo Cera, de 34 años, fue ultimada por un excompañero sentimental con dos balazos, uno en el rostro y otro en el tórax, en medio del monte en el área rural cercana al sur del casco urbano de Ciénaga, después que el sospechoso la sacara de su casa la noche del domingo.
Este feminicidio, el segundo en el municipio luego que el viernes asesinaran a una trabajadora sexual en el centro de la localidad, ocurrió a las 2:00 de la madrugada de este lunes 31 de agosto, a 300 metros de una invasión ubicada en cercanías a la obra de la variante Sur de Ciénaga.
Según se conoció, vigilantes de la mencionada obra vial escucharon las detonaciones, por lo que tras dar aviso a la Policía fueron a verificar, encontrando el cadáver de la mujer y al sospechoso, el cual fue identificado con el alias de ‘Guadaña’, sin embargo, este logró escapar a pesar que lo habían alcanzado a retener.
'Todo indica que este fue un hecho pasional, pues se logró determinar que el sospechoso y la víctima habían tenido una relación en el pasado', manifestó el coronel Óscar Solarte, comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta.
El oficial agregó, que con el apoyo de la Fiscalía se llevó a cabo un allanamiento en la vivienda del presunto autor del feminicidio, encontrando la ropa con la que fue descubierto por los testigos, por lo que se desplegó un plan candado regional para lograr su ubicación y judicialización.
La sacó a la fuerza
Por su parte, familiares de la occisa revelaron que alias ‘Guadaña’ llegó a la casa mientras departían, amenazando a Cantillo Cera con matar a una hermana si no se iba con él, sin que volvieran a tener noticias suyas hasta que les avisaron que la habían matado.
'Ella había tenido una relación con él hace mucho tiempo, pero ya habían terminado; él estaba cómo obsesionado con ella', agregó una hermana de la víctima.
La inspección técnica y levantamiento del cadáver estuvo a cargo de criminalistas de la Sijín, quienes acabado el procedimiento trasladaron el cuerpo hasta la morgue de Ciénaga, donde fue regresado a sus dolientes tras la necropsia.
