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La agreste topografía de la Sierra Nevada de Santa Marta ha impedido el acceso a las zonas de la parte alta del municipio de Ciénaga, que llevan seis días a merced de las llamas, que han arrasado aproximadamente unas 700 hectáreas de bosque seco y cultivos de café y frutales.

La conflagración inició el lunes en cercanías al corregimiento de San Pablo y avanzó rápidamente hasta alcanzar la jurisdicción del corregimiento de San Pedro, luego amainó el miércoles pero el jueves se reactivó, debido a los fuertes vientos y altas temperaturas, que se han constituido en los principales obstáculos para poder sofocar las llamas, además de la dificultad del terreno.

Ante esta situación, las comunidades afectadas solicitaron el apoyo aéreo de helicópteros dotados con ‘bambi bucket’ para apagar las conflagraciones, que han reducido a cenizas varias hectáreas de limón, guayaba, café y mango, dejando a los campesinos que residen en la zona sin sustento.

Igualmente, el incendio está acabando con la vegetación nativa propia del bosque seco tropical, hábitat de especies como monos, armadillos, iguanas, guacamayas, boas, ardillas y osos perezosos, entre otras, dejando a estos animales en riesgo.

Rodolfo Tafur, agricultor del corregimiento cienaguero de San Pedro, aseguró que 'hasta ahora el daño ambiental es grande, pues varios cerros se han quemado'.

'Estos incendios comienzan en la parte plana, en cercanías de la carretera negra y se van extendiendo hasta llegar a las fincas y los bosques', anotó.

Agregó que 'estos eventos nacían en los grandes terrenos que hay en la entrada de San Pedro, donde hay quema de basuras'.

No obstante, Tafurt fue enfático al aclarar que 'la culpa no es de los campesinos, sino personas ociosas que le prenden candela a lotes baldíos, o que arrojaban desechos como vidrios que, con las altas temperaturas generan focos de combustión'.

Así mismo, hace un par de días se había registrado otro incendio en sector de ‘El Marañón’, también en jurisdicción de Ciénaga, en donde resultaron afectadas un poco más de 60 parcelas en estribaciones de la Sierra Nevada.

Tanto el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Ciénaga y la Defensa Civil han hecho todo lo posible, junto con los campesinos de las zonas afectadas, para controlar las conflagraciones valiéndose solamente de herramientas manuales, ya que por la escarpada topografía se les hace imposible llegar a los focos del incendio con las máquinas extintoras.

Entre tanto, la Alcaldía de Ciénaga, a través de la Secretaría de Gobierno y la Unidad Municipal de Gestión del Riesgo de Desastre han brindado todo su apoyo, para que los bomberos permanezcan en las zonas de la emergencia y puedan seguir combatiendo las voraces llamas.

'Los incendios están siendo provocados y no producidos por la temporada seca', confirmó Eddie Pabón, coordinador de Gestión del Riesgo de Desastre en Ciénaga.