Desde tempranas horas de este martes una información periodística emitida por la radio y los portales noticiosos movilizó a Santa Marta. Elías José, un bebé de un mes y 11 días de nacido había sido raptado la noche del lunes en el barrio Pescaito, al norte de la ciudad. Una mujer fue la autora.
Las fotos del niño invadieron las redes sociales y los grupos de whatsApp multiplicaban la triste novedad. El comentario en las esquinas y tertuliaderos de Santa Marta no era otro que la desaparición del pequeño, hijo de Orlaine Sánchez, una joven venezolana que hacía tres meses, embarazada y enferma, había llegado a esta capital para unirse a su madre Zunaily, con un año de permanencia.
El robo de la criaturita fue a las 8 de la noche del lunes, en la calle 6 con carrera 11, de Pescaito, donde funciona el supermercado ARA, a cuatro calles de la residencia en donde viven en alquiler; 14 horas después, a las 10 de la mañana del martes, una llamada al Gaula daba cuenta del abandono de un bebé en el puesto de salud de Gaira. Al parecer era Elías José.
'¡Apareció el niño¡, ¡apareció el niño!', gritaban emocionadas la abuela Zunaily Sánchez y su hija Orlaine, al tiempo que desde la oficina del Gaula, en El Rodadero, se desplazaban a Gaira para verificar que ese niño abandonado era su bebé.
Acto seguido y tras confirmar que, en efecto, se trataba del pequeño que buscaban afanosamente, el comandante de la policía metropolitana de Santa Marta, coronel Gustavo Berdugo, dio la buena nueva a la opinión pública. Emocionado lo puso en brazos de su madre.
'Aquí le entregamos a su bebé, está sanito y cuídelo', le dijo el oficial en medio de aplausos y voces de gratitud de enfermeras, pacientes y personal científico del lugar.
'Gracias a ustedes los policías, a los periodistas y a todos quienes en una u otra forma fueron solidarios con nuestro dolor', anotó la abuela Zunaily.
Seguidamente expresó: 'Hemos vuelto a vivir, tener a Elías José en nuestros brazos es algo grandioso'.
Ya en las redes sociales circulaba el afiche con la foto del niño desaparecido y la imagen de la presunta raptora, obtenida de una cámara de seguridad. Igualmente el documento informaba de una recompensa de $20 millones por el suministro de información que ayudase a su paradero.
Está sano
En el puesto de salud el bebé fue auscultado por la médica Aurelia Andrade, quien aseveró que 'no tiene ninguna anormalidad, todo está bien dentro del examen físico'. 'Solo presenta un sarpullidlo por alguna alergia', comentó.
Añadió que 'vino con bastante calor, pero no presentaba fiebre' y dijo que presentaba una irritación 'presumiblemente por una ropa que le pusieron'.
Indicó que 'en principio el bebé lloraba mucho, pero cuando llegó la mamá se calmó'. La médica confesó que cuando lo examinó no sabía que era el niño que desde bien temprano tenía en pie a toda una ciudad.
Tras ser dado de alta fue llevado a la sede del Gaula de la Policía y después de un procedimiento de rigor, el bebé, su abuela y su madre, regresaron a casa acompañados de personal de la Policía de Infancia y Adolescencia.
Cómo llegó
Según las personas que estaban en el puesto de salud al momento de llegar el bebé, éste fue conducido hasta allí por una mujer que sin despertar ninguna sospecha, le pidió a una señora que estaba en la entrada principal que le tuviera el niño.
'Dijo que le hiciera el favor mientras pagaba la carrera al mototaxista', comentó la mujer, anotando que 'nunca pensé que pretendía abandonar lo porque no me entregó la pañalera'.
Al ver que los minutos pasaban y no egresaba, la mujer - cuya identidad se mantiene en reserva - comunicó al personal científico y administrativo. De inmediato imaginaron que podría ser el niño que había sido robado y fue entonces cundo dieron aviso al cuadrante. En ese momento el bebé estaba siendo auscultado por la doctora Andrade.
De inmediato se desplegó un operativo policial con el fin de localizar a la mujer que dejó a Elías José en el puesto de salud. Al cierre de la noticia el esfuerzo resultaba infructuoso.
La mujer que raptó al niño habría conocido a Orlaine en el mercado público de Santa Marta. Comentan que supuestamente se habría encariñado con el bebé, habiéndole regalado pañales y 'cositas'.
Relata Zunaily Sánchez (la abuela), que el lunes se comunicó con ella y le manifestó que le iba a regalar un coche y que le dijera a su hija que se encontraran en el Supermercado ARA de Pescaito.
'Mi niña no iba a llevar al bebé pero ella le insistió que no lo dejara en casa que de pronto le regalaba algo más y era mejor que él estuviera', señaló.
Manifestó que cuando estaban en el lugar referenciado la mujer le preguntó que si la niña tenía leche y ante la respuesta, le dio plata para que comprara y le dijo que ella le cuidaba al pequeño.
'Cuando Orlaine salió del ARA, se dio cuenta que la señora no estaba y entonces me llamó por celular: Mami me robaron el bebé, me lo robaron', fueron las angustiosas palabras. Testigos comentan que la vieron cuando tomó una mototaxi.
Lo increíble de la historia es que Orlaine nunca supo cómo se llamaba la ‘dadivosa mujer’ que le hacía regalos a su hijo, y que más tarde se convertiría en la que le hizo pasar el sufrimiento más grande de su vida.