El cielo rompió a llorar durante una hora después de que los familiares de Génesis Rúa Vizcaíno, de 9 años, sepultaran sus restos en una de las bóvedas del cementerio central San Rafael, en Fundación, Magdalena.
Acompañados por más de un millar de personas provenientes de todas partes del departamento, Bejamín y Yeimy los padres de la pequeña fueron arropados por los magdalenenses que, a grito unísono, rechazaron la violencia contra los menores y clamaron ¡justicia!, ¡justicia!, ante las autoridades.
El homenaje comenzó a las 8:00 a.m. de ayer en la casa de la víctima ubicada en el barrio San José, en la ‘Esquina del Progreso’, cuando su ataúd fue trasladado en hombro hasta la iglesia de San Rafael, en la zona céntrica.
La marcha fúnebre se movió a paso lento, en medio de sollozos que se entremezclaron con el sonido de la banda de paz de la escuela Santa Catalina, del Sena. Niños de diferentes escuelas de Fundación, todos vestidos de blanco, portando globos del mismo color (símbolo de paz y pureza) encabezaron el sepelio.
'A todos los fundanenses nos une el dolor, por eso abrazamos y acompañamos a los familiares de Génesis. Le pedimos a Dios que ningún niño en Colombia y el mundo pase por lo que vivió. Ella era un ángel, el brillo de los ojos de sus padres, pero ahora los cuida desde el cielo', dijo con la voz entre cortada Mariana García, una de las mujeres que llevaba globos blanco en la procesión.
