Los cataqueros demostraron este miércoles su lado más solidario al acompañar de manera masiva el último adiós de Katia Montenegro Soto y el bebé de siete meses que murieron el pasado lunes por la inhalación de monóxido de carbono, gas incoloro e inodoro emanado por una planta eléctrica que dejaron encendida toda la noche, luego de quedar sin energía en el municipio.
El alcalde municipal Pedro Sánchez, autoridades administrativas, eclesiásticas y civiles, expresaron sus condolencias a las familias de las víctimas de la tragedia que ocurrió en el barrio El Carmen.
'Este accidente enluta a todo el pueblo de Aracataca, por lo que enviamos y acompañamos a los miembros de la familia Ochoa Navarro en este dolor', dijo el mandatario.
La ceremonia religiosa se realizó en la Iglesia San José, y a las 4:00 p.m., familiares y amigos partieron hacia el cementerio local para darle la sepultura.
'Esperamos que Dios los tenga en su gloria y meta su mano para que los lesionados puedan salir de las clínicas', señaló Jaime Guzmán, líder cívico.
Mientras que en el corregimiento de Mandinguilla, en Chimichagua (Cesar) se llevó a cabo la despedida de la señora Luz Marina Navarro, de 60 años, sepultada en el cementerio local.