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La liberación en el mar Caribe de 14 tortugas y un delfín, sanados de sus heridas y enfermedades en el Centro de Rehabilitación de Mamíferos del Acuario Rodadero, fue para quienes participaron de esta jornada un acto de emociones encontradas. Por un lado la felicidad de verlos partir a su hábitat y unirse a sus manadas; por otro, la tristeza de despedirse de ellos tras meses de convivencia.

Desde el Acuario tres lanchas zarparon mar adentro; dos transportaban a los animales y el equipo científico y una tercera - timoneada por el líder del programa, el capitán, Juan Carlos Ospina de Armas - llevaba a bordo a filántropos de la naturaleza, entre ellos, Dámaso Yepes y Jairo Echeverry.

En frente de la costa de El Rodadero, las especies fueron lanzadas al agua. Las primeras fueron las tortugas, en su mayoría del género Carretta , llamadas también Caguama o Cabezona, y entre quienes se encontraba una que fue rescatada moribunda en Tasajera,.

Seguidamente el turno fue para un delfín de la familia Sotalia, a quien le dieron por nombre ‘Poseidón’, en clara alusión a su rol como ‘señor de los mares y océanos’. Había llegado cuatro meses atrás magullado y enfermo.

Entre aplausos y lágrimas, los animales fueron despedidos. '¡Feliz navidad!', dijo el capitán Ospina, al momento de ser liberados. 'Buen viento y buena mar', expresó Yuri Durán Solano. 'Dejan un gran vacío', afirmó Dámaso Yepes.

Ospina de Armas, recalcó que ver partir a estos animales, 'es el verdadero premio que uno se lleva'. 'Se gasta mucho dinero pero la felicidad que se siente al liberarlos no tiene precio', precisó.

La tortuga ‘Arpón’