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En la Urbanización El Parque, al sur oriente de Santa Marta, donde el domingo fue lapidado el vigilante Rafael Alejandro Viloria Franco, ante la mirada desconcertada de muchas personas, cunde el miedo; las calles están solas y no se escucha el bullicio característico del sector.

La reciente incursión de un grupo motorizado al barrio, arremetiendo a piedras contra una casa, lanzando improperios y amenazando a su dueño, agudizó la zozobra de los habitantes, quienes en las últimas 72 horas han cambiado su rutina y cotidianidad.

El hecho de que el grupo de mujeres que a tempranas horas del día hacen aeróbicos en la cancha de baloncesto (frente a la Iglesia) dejaron de hacerlo y que los niños de las escuelas de fútbol falten a sus prácticas, son evidencias del temor que existe entre la comunidad.

'Es que las imágenes del monstruoso suceso la tenemos grabadas en nuestras mentes y nos hacen sentir culpables porque quizás no fuimos solidarios con la víctima', afirmó Gerardo Olmos, uno de los moradores.

El líder cívico Óscar Madero Cujía, gestor de tareas encaminadas al progreso de su barrio, con cerca 35 años residiendo allí, manifestó que el sector pareciera estar en ‘toque de queda’. 'La gente se está recogiendo temprano y eso es mucho decir', comentó.

‘El Diablo’, como con cariño le conocen, afirma que 'estamos viviendo un momento difícil, por eso necesitamos de los buenos oficios del gobierno local'.

'Esta es una zona de gente buena, de personas pobres que se han superado, por eso pido a los samarios que por favor no nos estigmaticen', aclaró.

Audiencia comunal

Óscar Madero será uno de los que intervendrán en la tarde de este jueves en la audiencia comunal que con presencia de la Policía, la Alcaldía y otras autoridades, se cumplirá en la cancha de baloncesto.

El dirigente cívico anunció que pedirá la realización de charlas educativas sobre los perjuicios de la droga y la sana convivencia; igualmente solicitará la presencia permanente de policías o en su defecto un CAI móvil.

La reunión comunal está prevista para las seis de la tarde y se espera mancomunar fuerzas entre las autoridades y los habitantes del barrio en pro de mejorar la conducta de los asociados y la calidad de vida de los mismos.

¿Por qué a mí?

Rodolfo González Llanos es el dueño de la casa que fue apedreada por los vándalos que se movilizaban en motocicletas y dice no saber por qué lo atacaron. Comentó que apenas tiene ocho meses de estar viviendo allí con su mujer y un hijo de 11 años; aunque debido a lo que le sucedió, en las últimas horas decidió dejarla sola.

Dijo no tener 'la menor idea’ del porqué arremetieron contra su vivienda, si 'no tengo nada que ver con lo que pasó; incluso ni cuenta me di'.

Narró que cuando el grupo llegó a su casa estaba con su hijo, sintió el estropicio y se asomó a la ventana. 'Intentaban entrar y gritaban cosas como 'te vamos a matar… 'María Eugenia se respeta', anotó.

Cabe recordar que el sector mencionado por los vándalos es donde vivía Rafael Alejandro Viloria, el guardia de seguridad asesinado.