A las seis de la mañana de este lunes partió rumbo a Costa Rica el crucero Ámsterdam, dejando obligadamente en Santa Marta a dos pasajeros que por urgencia médica tuvieron que ser atendidos en una clínica local. Cada uno de ellos quedó con su respectivo acompañante.
La embarcación había arribado al puerto samario el domingo a las 6:30 de la mañana procedente de Fort Lauderdale, Estados Unidos y debía continuar el recorrido a las 7 de la noche del mismo día, pero el mal tiempo (fuerte brisas) impidió su zarpe.
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Ello coincidió con el malestar que presentaron dos turistas mujeres, una norteamericana que registró un cuadro agudo de apendicitis, lo cual hizo necesaria se le practicara una cirugía, siendo internada en la clínica Perfect Boddy. Es oriunda de Virginia, Estados Unidos y quedó al cuidado de su señora madre.
La otra paciente es una longeva, de 82 años, natural de Suiza a quien una insuficiencia respiratoria motivaron su evacuación de la embarcación. Quedó en compañía de su esposo.
Álvaro Fernández de la agencia Turismerk, destacó el oportuno servicio de la Alcaldía Distrital en cabeza del director de turismo Aldo Hernández y de la Policía de Turismo, que con base en el Plan de Contingencia previsto para casos especiales como los ocurridos permitieron atender las urgencias sin contratiempos.
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Jorge Isaac Rivera, de la firma Transmares, el Agente Marítimo, comunicó que las dos pacientes están en la ciudad, uno aún en la clínica (la de la cirugía) y otra hospedada en el hotel Rodadero, ubicado en el balneario del mismo nombre.
'Por lo general estos cruceros traen personas de avanzada edad, lo que hace mayormente posible que se enfermen, por lo que para esos casos hay planes establecidos. Es un proceso rutinario', dijo Rivera.
A estos pasajeros los cobija un seguro médico internacional.
Al tiempo que este lunes por la mañana el crucero Ámsterdam se despedía de Santa Marta, otro entraba. Se trata del Sereníssima, con 90 pasajeros y 58 tripulantes. Llegó procedente de Curazao y su próximo destino es Cartagena.