Un abrazo interminable con su hermano Augusto y su sobrina Verónica, fue el final del drama que vivió Ricardo Trujillo Mejía, el hotelero de 79 años que fue secuestrado el viernes anterior por delincuentes comunes en Guachaca, al oriente de Santa Marta. Ayer fue rescatado por el Gaula de la Policía Nacional en ese mismo sector.
Mostrando en su rostro la fatiga producto de los cuatro días de desventura, el empresario fue dejado libre en la vereda Pueblo Nuevo, en las estribaciones de la Sierra Nevada, debido a la presión que en el área ejercían los uniformados del grupo especializado de la institución armada.
Los secuestradores huyeron del lugar con rumbo desconocido, situación que aprovechó la víctima para caminar hasta la carretera ayudado por un indígena Arhuaco.
'Pese a lo que padeció su estado de salud es bueno', reportó el general Miguel Ángel Bojacá, director de talento humano de la Policía Nacional y padrino para Santa Marta en la maratón de la seguridad que se cumple en todo el país.
El oficial indicó que 'fue una tarea de inteligencia, con patrullajes permanentes en la zona, lo cual hizo que los secuestradores se vieran obligados a abandonar a su víctima'.
'Hay que resaltar también el apoyo de la población civil', añadió el General Comentó que los plagiarios exigían 150 millones de pesos por la liberación.
Pensó que moriría. Sentado en un sillón del comando de la Policía Metropolitana, Ricardo Trujillo, recibió el abrazo de sus familiares, su hermano Augusto y sus sobrinos Tommy y Verónica.
Dijo que estaba feliz por el regreso a la libertad y por el reencuentro con los suyos.
Indicó que no fue maltratado en extremo y que siempre estuvo en un mismo lugar, comiendo galleta de soda y agua de panela. Sin embargo anotó, 'pensé que me iba a morir'.
Reveló que sus captores eran todos hombres y que fue muy poco lo que habló con ellos.
Ricardo Trujillo, un paisa amigo de la naturaleza e impulsor del ecoturismo en la zona del Parque Tayrona y Guachaca, afirmó que 'es muy triste que esto ocurra en una región que tiene un futuro turístico muy bello'.
'Con cosas como esta lo dañan y desacreditan a la ciudad y a todos sus lugares hermosos', precisó.
Pese a lo sucedido, Ricardo Trujillo Mejía dice que no se irá de Guachaca donde tiene una finca de nombre Playa Bonita, justamente de donde fue secuestrado.
Tres en 72 horas. Este es el tercer rescate de secuestrados que tiene connotación en Santa Marta en las últimas 72 horas, de los cuales dos estuvieron a cargo del Gaula de la Policía Nacional y uno del Gaula del Ejército.
El domingo por la noche el ejército con apoyo de la Fiscalía hallaron en una vivienda del barrio Pescaíto, un bebé de nueve días que había sido raptado por una mujer en el barrio Sourdis de Barranquilla.
El lunes por la madrugada, en Bosconia fue recuperado por la Policía el empresario samario Eduardo Vives Lacouture, tras dos meses de haber sido plagiado en la Zona Bananera.
Ayer se produjo el de Ricardo Trujillo, en Guachaca.
La ciudadanía espera que con la suerte que corrieron los anteriores, así suceda con Orlando Jaraba del Castillo y el comerciante Rafael Jaraba Ternera, privados de la libertad hace 4 y dos años, en Plato y Santa Marta, respectivamente.
