La depresión tropical número 19 fue elevada este jueves, en horas del mediodía, a la categoría de
tormenta tropical con el nombre de ‘Sara’, lo cual ha encendido las alarmas en todo el Caribe y, por supuesto, en la zona insular del país.
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El sistema se desplaza hacia al oeste y ha propiciado el desarrollo de lluvias con tormentas eléctricas en sectores del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, así como en el centro y oeste del mar Caribe colombiano y áreas del departamento de La Guajira.
Sin embargo, pese que con el paso de las horas ha adquirido fuerza, y se espera que la tormenta tropical Sara aumente la intensidad de los vientos y lluvias durante este fin de semana y paulatinamente se vaya acercando a la categoría de huracán, al mismo tiempo que irá alejando su área de influencia del territorio colombiano, por lo cual su injerencia en las condiciones meteorológicas irá disminuyendo, de acuerdo con las autoridades.
Las islas en alerta naranja
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) indicó que se mantiene el nivel naranja (alistamiento) para la zona insular, dado que se esperan persistentes precipitaciones, adicional a notables incrementos en la velocidad del viento y altura del oleaje.
“Se invita a la comunidad marítima a estar atentos a los diferentes comunicados de las entidades con respecto a la tormenta tropical Sara, la cual se encuentra transitando sobre el noroeste del mar Caribe, lo que continuará favoreciendo precipitaciones sobre el Caribe colombiano. Se sugiere mantener medidas de seguridad en actividades náuticas y movilización de embarcaciones que se encuentran en la zona, de acuerdo con las disposiciones de la autoridad marítima local”, informó.
Situación en la Costa
Pese a estas noticias, lo cierto es que la situación del invierno en Caribe colombiano se ha recrudecido en los últimos días, con varias emergencias y alertas vigentes en la región.
Por ejemplo, más de 1.500 familias que habitan las zonas urbana y rural del municipio turístico de Tolú, en el Golfo de Morrosquillo, Sucre, están perjudicadas con las inundaciones registradas desde el fin de semana por cuenta de los desbordamientos de arroyos.
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Los afectados reportaron que al momento inicial de la emergencia hubo evacuaciones por parte de la Cruz Roja para los niños y los adultos mayores, pero las aguas aún están en las casas y las vías de acceso, por lo que temen enfermedades.
En el sector de Pita, una zona amplia de Tolú, sus pobladores reclaman ayuda porque las aguas les dañaron todo lo que tenían en sus casas.
Los 25 municipios del Cesar se encuentran en alerta roja. En La Jagua de Ibirico hubo desbordamiento del río Sororia, en la vereda La Guarumera, quedando incomunicada.
La Alcaldía de Valledupar emitió dos decretos de calamidad pública y anunció el cierre temporal de los balnearios Hurtado, La Mina, La Vega y Badillo.
De igual manera, los organismos de socorro han caracterizado a 43 familias en riesgo inminente.
En Cartagena se estima que se podrían presentar cielos que varíen de parcialmente nublados a mayormente nublados, con lluvias dispersas de intensidad ligera a moderada.
Aunque estas condiciones no se consideran severas, es crucial que la ciudadanía se mantenga atenta, especialmente en áreas susceptibles a inundaciones o deslizamientos.
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Además, en la capital de Bolívar se han venido realizando labores de sensibilización y limpieza en 25 frentes de trabajo, con el objetivo de mantener los canales despejados y reducir los riesgos de inundación.
Según el pronóstico del Ideam, existe un 71% de probabilidad de que el fenómeno de La Niña incremente las lluvias, lo que exige una respuesta rápida y coordinada en el país.
Se esperan más lluvias durante este fin de semana, así que la recomendación a los ciudadanos es mantenerse prevenidos ante las eventualidades del invierno.
