La estudiante de noveno grado de la Institución Educativa Distrital Madre Marcelina, e integrante del programa Ondas, participará en la inmersión académica ‘Misión México: Investigadoras Ondas’, que se llevará a cabo este año en Ciudad de México.
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Shaiel, de 14 años de edad, que hace parte de la comunidad afrocolombiana, junto con sus compañeras diseñaron un prototipo de baldosa piezoeléctrica que genera energía limpia a través de sensores, a partir de la energía cinética producida al contacto de las personas al caminar sobre ellas.
Fue gracias a este prototipo que fue seleccionada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación para representar a Barranquilla, a su comunidad palenquera y a su institución ante una inmersión académica.
El alcalde Alejandro Char, destacó las inversiones que realiza su administración en las instituciones educativas, “estas inversiones las vemos reflejadas en los logros de estos estudiantes que, con sus conocimientos, aprendizajes y talentos, aprovechan todas las herramientas de la educación y la tecnología que estamos poniendo a su servicio. Cada día son más los jóvenes de nuestros colegios públicos que nos representan con sus conocimientos en muchas partes del mundo, porque los estudiantes de Barranquilla están a otro nivel'.
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Desde el mes de abril de este año, Shaiel se inscribió para participar en esta inmersión. La joven estudiante pasó un arduo proceso de selección, cumplió con los requisitos y requerimientos, luego presentó una entrevista con niñas de otras ciudades de Colombia y finalmente se convirtió en una de las participantes que viajará a Ciudad de México para afianzar sus conocimientos en áreas Stem, y por supuesto, en el cuidado del medioambiente.
“Con 14 años fui seleccionada entre muchas jóvenes barranquilleras para representar a nuestra ciudad en ‘Misión México’. Una iniciativa del programa Ondas, para que nosotras, como afrodescendientes e indígenas, podamos representar a nuestro país con nuestros proyectos frente a la innovación tecnológica”, destacó Shaiel.
La joven lleva más de tres años participando y liderando el semillero de investigación de su institución ‘Zona de Investigación’, en la línea direccionada al cuidado del medioambiente ‘Greenzone’ en el que, mediante el aprendizaje de áreas como la ciencia, la tecnología, matemáticas, y competencias propias del mundo actual, ha fortalecido sus conocimientos, habilidades de resolución de problemas y pensamiento crítico, desempeñándose como una mujer abanderada por estrategias con enfoque Stem.
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También, es importante destacar que ‘Zona de Investigación’ ha sido reconocida a nivel internacional y nacional, y ha impactado a más de 1000 estudiantes en sus 14 años de funcionamiento.
La secretaria distrital de Educación, Paola Amar, con mucha emoción dijo que es motivo de orgullo para todos los barranquilleros, la participación de las mujeres en laciencia-. “Desde la Alcaldía de Barranquilla estamos trabajando por una apuesta colectiva de integración de las niñas y las adolescentes de nuestros colegios en este enfoque. El mundo entero merece el potencial, la inteligencia y la creatividad de las mujeres. Estos espacios de interacción e intercambio de conocimientos dotan de instrumentos a los jóvenes, para que sean ellos quienes desarrollen y potencialicen sus innovaciones tecnológicas, y de esta manera puedan contribuir a la construcción de territorios sostenibles y amigables con el medio ambiente, la ciencia y la tecnología”.
Señalo que el plan de desarrollo apunta al fortalecimiento de la educación inclusiva, equitativa y de calidad, para asegurar el acceso a la educación oficial, sin distinción de situación o características personales. Este acceso directo se extiende a diversos grupos, entre los que están las comunidades étnicas.
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Para el docente de Biología y Química de la IED, Carlos Ramos, docente de Biología y Química, este logro de Shaiel lo compromete a seguir trabajando para que niños, niñas y jóvenes tengan acceso a una educación de calidad bajo el enfoque Stem. ”Sabiendo la importancia del desarrollo de competencias científicas y el acceso a la tecnología, a la innovación y a la ciencia, este logro nos compromete a seguir sumando esfuerzos desde el aula, para promover la participación activa de los estudiantes, escuchando sus inquietudes, que a su vez se convierten en preguntas y problemas que dan la apertura a procesos de indagación escolar. Y así, comenzar a crear escuela desde lo que piensan los estudiantes y desde su creatividad, para cerrar la brecha social que existe”.
Estos logros estudiantiles van de la mano del acompañamiento de grandes aliados, ya que desde las IED se está realizando un trabajo mancomunado con docentes, directivos e instituciones asociadas, como la Universidad Simón Bolívar y la Universidad de la Costa (CUC), en pro del fortalecimiento y la consolidación de las áreas Stem desde el interior del aula de clases.
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‘Misión México’ está direccionada a niñas, niños y adolescentes de cualquier etnia, con el propósito principal de otorgarles oportunidades de participación en escenarios donde prima la ciencia, la tecnología, la innovación y la sostenibilidad, y de esta manera concederles a los participantes diversos conocimientos que ayuden a evolucionar o actualizar sus prototipos, para lograr con ellos un mayor impacto hacia la comunidad.
El sueño inicia desde la escuela.
Desde hace 14 años, la IED Madre Marcelina ha implementado en su currículo un semillero de investigación, en el que, con diferentes enfoques como medioambiente, robótica y ciencia, los estudiantes han desarrollado proyectos para que resuelvan problemáticas del presente siglo.
Mediante ‘Zona de Investigación’, Shaiel y sus compañeras diseñaron una baldosa piezoeléctrica, prototipo electrónico y funcional, generador de energía limpia a partir de sensores piezoeléctricos. Este tipo de baldosa genera energía eléctrica a partir de la energía cinética que se produce al contacto de las personas al caminar sobre ellas.
Este proyecto busca suplir primeramente la necesidad de la institución para producir energía sostenible y por eso se proyecta ubicar en los pasillos del colegio. El sueño de Shaiel también es compartir sus avances tecnológicos con su comunidad étnica, generando energía de una manera más económica y así llenar de herramientas al territorio que la vio nacer.
Previamente, hicieron un análisis y estudio de mercado, y detectaron que, debido al aumento de las herramientas tecnológicas en el aula de clases, se había producido una alta demanda de energía eléctrica, porque la cantidad de estudiantes con dispositivos frente a la carga de la institución era más alta, sumando el uso de aire acondicionado y la cantidad de energía que estos gastan. Y precisamente por esa necesidad que presentaba la IED surge la idea de desarrollar un prototipo con el fin de recolectar energía sostenible.
