Es febrero y el sol resplandece en ‘La Arenosa’. El festivo ambiente que se respira en todas sus calles, acompañado de una rebelde brisa, indica que faltan pocas horas para que se comience su fiesta por excelencia: el Carnaval.
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Sombreros, camisetas, collares, lentes de sol y otros artículos alusivos al evento folclórico ‘inundan’ la tradicional calle 72. Hasta esta zona arriban algunos turistas para conseguir los atuendos y artículos que vestirán durante los cuatro días de fiestas.
Evelin Rodríguez, artesana, refugiada frente a un árbol de mango que le proporciona sombra, contó que –como todos los años– ha llegado a la Galería 72 para vender sus diademas y collares carnavaleros. Una forma de generar ingresos en medio de las carnestolendas.
'La venta de las diademas con flores es bastante concurrida, muchos les llama la atención como son elaboradas completamente a mano, entonces los turistas aprovechan para personalizarlas a su gusto', agregó Rodríguez.
Al hablar del Carnaval, esta artesana no oculta su rostro de alegría y dio algunos detalles de la forma en que elabora los accesorios que engalanan a cientos de mujeres en medio de las fiestas.
'Para hacer las flores empiezo por los pétalos, luego paso a los pistilos hasta montarla en las diademas y así la voy armando por completo. Aquí el Carnaval se vive con mucha alegría, el ambiente es muy diferente la fiesta nunca acaba', agregó.
Cabe recordar que en la ciudad se moverían alrededor de $500 mil millones durante los cuatro días de jolgorio.
