El 2021 ha sido todo un reto para el sector portuario de Barranquilla por todos los inconvenientes que se han presentado por el bajo calado, que en algunos momentos superaron sus cifras históricas, y las pérdidas económicas por desvíos de buques; sin embargo, se han registrado récord en movimiento de carga superando el total de lo movilizado en el 2020.
Cormagdalena aseguró –en su rendición de cuentas– que este año se invirtieron $107.183 millones para atender el mantenimiento de los tres sectores priorizados del canal navegable del río Magdalena; pese a esto el río llegó a tener un calado histórico de 6,2 metros, obligando a restringir la operación portuaria.
Para mitigar el impacto de la alta sedimentación, durante el año llegaron al canal de acceso las dragas Taccola, Bartolomeu Dias y la más reciente, la Xin Hai Hu 9, las cuales –en medio de dificultades– lograron mejorar la condición en los momentos críticos.
Otro de los puntos que enlodaron la situación de la zona portuaria de Barranquilla fueron las adjudicaciones y contrataciones de Findeter con las compañías dragadoras, debido a que en más de una ocasión los procesos registraron demoras.
Sobre estos hechos, en más de una ocasión los expertos consultados por este medio de comunicación reiteraron que se debían hacer estudios científicos detallados sobre las condiciones del río, porque la situación que se estaba presentando no solo se debía a las temporadas de lluvias –que este año fueron más marcadas que en anteriores por el fenómeno de La niña–, sino también a cambios hidrológicos.