El festival de guayaberas blancas, los pantalones beige, la avanzada de camionetas de alta gama y un estricto operativo policial, que incluye pastores belgas que olfatean toda la zona, ha llenado de intriga a los cientos de barranquilleros que, solo a través del sistema de transporte masivo Trasnmetro, pueden transitar por la carrera 46, por el sector de la Plaza de la Paz.
Los usuarios, curiosos ante la escena, estampan el rostro ante el vidrio de los articulados. Toman fotos. Cabecean de un lado a otro y, con las manos, intentan pedir explicaciones de qué personaje está en la zona.