Desde que comenzó la cuarentena, muchos colegios públicos y privados comenzaron a implementar la educación virtual para asegurar la continuidad en la formación de los estudiantes, lo que ha generado en algunos padres de familia inconformidades por el sistema.
Algunos acudientes dicen que la situación se torna 'difícil' porque algunos colegios no tienen en cuenta si los papás teletrabajan, cuántos computadores hay disponible en casa o si tienen servicio de internet. Además, sobrecargan a los niños de tareas.
En el caso de niños en los niveles de kinder y primaria, los padres o cuidadores aseguran que todo el tiempo deben estar sentados con ellos porque 'no puedes dejar a un niño solo en un computador'.
Sin embargo, reconocen que a medida que han pasado los días se han ido familiarizando con las clases y los profesores han mejorado la metodología de estudio.
Elsy Robles, rectora de la Institución Educativa Sofía Camargo de Lleras, aseguró que han tenido que hacer un proceso de formación con los padres de familia de las estudiantes menores -a través de videos explicativos- para que puedan acompañarlas en sus procesos escolares.
Con las alumnas mayores, que no necesitan acompañamiento de sus acudientes por tener conocimiento en el uso de plataformas digitales, se trabaja con horarios preestablecidos -de acuerdo con la recomendación del Ministerio de Educación- de cuatro horas las de bachillerato y cinco horas las de décimo y undécimo (quienes tenían jornada única).
Aseguró que además de destinar los viernes para hacer retroalimentaciones y mirar de qué manera pueden mejorar la calidad del estudio, los profesores -dependiendo la disponibilidad del tiempo- se encargan de verificar todos los días que las alumnas estén aprendiendo.
Elsy Robles dio a conocer que en el colegio tienen un porcentaje mínimo de estudiantes de estrato 1, las cuales no tienen acceso a plataformas digitales, por lo que han optado en entregar de manera física a su acudiente las actividades para realizar en casa.
La clave del éxito
Carmen Ricardo, coordinadora de la Maestría en Educación Medida por TIC de la Universidad del Norte, aseguró que el éxito de la educación a distancia en ambientes escolares y universitarios depende de factores como el profesorado, el sistema de las instituciones y los alumnos.
Explicó que es importante que los profesores tengan las competencias necesarias en el uso de la tecnología para diseñar los escenarios de aprendizaje correctos para este tipo de formación y tener en cuenta la población a la que se dirigen, ya que no es la misma metodología para los estudiantes de grados avanzados que para los que apenas están comenzando su vida escolar.
Sobre estos últimos, señaló que los educadores deben trabajar de la mano de los padres de familia y formarlos porque son los que están acompañando a los niños desde las casas.
En el caso de las instituciones educativas, resaltó la importancia de tener recursos y una infraestructura que permita brindar las herramientas necesarias para desarrollar el plan de estudio. Además, señaló que deben tener un nivel de apropiación en la formación de los maestros.
Por otro lado, se encuentran los estudiantes -que de una u otra forma- logran desenvolverse en el uso de tecnologías y el proceso de estudio se les facilita. Sin embargo, hay algunos que carecen de estos dispositivos electrónicos por su condición económica, lo que hace que los colegios deban implementar estrategias diferentes en la medida de lo que sea posible.
'En estos momentos, la educación se está enfrentando a un reto, dejar de hacer las clases virtuales sería peor que no crear un escenario de formación para los estudiantes', dijo la experta en educación virtual.
Carmen Ricardo señaló que si Colombia va a enfrentar un nuevo semestre con la metodología de educación a distancia, se pueden hacer adaptaciones y transformaciones para poder acompañar estos procesos formativos con el propósito de mejorar la experiencia de los alumnos.
Reconoció que en algunos colegios y hogares no será sencillo por la falta de recursos y herramientas, por lo que la idea es buscar apoyo del Gobierno y evitar que se suspenda la educación.
